Sandra y Jordi, dos pescadores submarinos, salieron ayer en su embarcación rumbo a la zona de es Vedrà cuando, a punto de llegar al islote, tal y como ellos mismos relatan, vieron un gran saco de plástico blanco flotando en la superficie del agua.

Al acercarse más se dieron cuenta de que había una tortuga Caretta caretta enredada en él, por lo que procedieron a sacarla del agua y colocarla en su barca.

"El animal tenía enredada en la aleta delantera derecha varios hilos del saco, que le obstruían la circulación. La aleta tenía principios de gangrena, estaba hinchada y blanca", explican.

La tortuga, de tanto luchar para librarse del plástico, se encontraba "exhausta", pero encima de la embarcación se relajó. Sandra y Jordi llamaron al 112, desde con les pusieron en contacto con los agentes de Medio Ambiente, que "se personaron en nuestra localización en unos 40 minutos", añaden.

Los agentes se hicieron cargo de la tortuga y les explicaron que se le haría la primera cura en Ibiza y tras ello sería enviada al centro de recuperación de Mallorca.

"Por nuestra afición, conocemos muy bien el mar y sabemos lo importante que es preservarlo no solo mediante una pesca selectiva y sostenible como es la nuestra, sino también con acciones que van más allá como el rescate de fauna en peligro. Son pequeños detalles que todos podemos hacer. A todos nos gusta disfrutar del mar y está en nuestras manos que también lo puedan hacer las generaciones venideras", añaden Sandra y Jordi.