De "situación extrema y desesperante" ha calificado el teniente de alcalde de Villamuelas, Nelson Pérez, lo que se está viviendo en esta localidad toledana, cuyos vecinos llevan tres días sin luz, agua caliente ni calefacción, lo que ha llevado a que familias enteras utilicen sus propios coches para calentarse.

Así lo ha subrayado en declaraciones a Efe el teniente de alcalde de esta localidad de 600 habitantes, que en estos momentos duplica su población, dado que muchas personas que han ido a pasar allí las fiestas navideñas no han podido regresar a sus municipios de residencia, debido a la gran nevada ocasionada por la borrasca Filomena, dado que las dos carreteras de acceso al pueblo están intransitables.

"Estamos desesperados, sin luz, agua caliente ni calefacción desde el viernes y totalmente incomunicados", ha remarcado Pérez, que asegura haberse puesto en contacto con la Junta de Comunidades, la Diputación, el 112 y la empresa suministradora eléctrica, sin que hasta el momento "nadie de soluciones".

En este sentido, ha indicado que el Gobierno regional les dicen que son conscientes de la situación de Villamuelas pero que "tengan paciencia porque hay muchos municipios que atender", y desde la Diputación Provincial les aseguran que va a ir una máquina quitanieves a limpiar el pueblo, "pero los días pasan y la máquina no llega", ha lamentado el representante municipal.

Por otro lado, desde Naturgy les toman nota de la incidencia pero "seguimos igual, nadie arregla nada y llevamos ya tres noches en esta situación extrema y desesperante que ha llevado a familias enteras a calentarse en su propio coche", ha lamentado Pérez, que asegura haber recibido llamadas de familias con niños pequeños que no dejan de llorar por el frío y mayores tiritando por la misma causa.

En este punto ha destacado que esta noche se han registrado en la localidad 9 grados bajo cero y las previsiones para la próxima es de 13 grados bajo cero, por lo que no saben qué va a pasar, "pero desde luego nada bueno", ha afirmado Pérez.

Además, a todo esto se une que la única farmacia del pueblo está cerrada porque la persona que la atiende es de otra localidad y no puede llegar a Villamuelas y las tiendas están perdiendo el género, debido a la falta de refrigeración, y otras ni siquiera pueden abrir al tener apertura eléctrica.

"Esto sin contar que no podemos comunicarnos por el teléfono fijo, al haberse caído los cables de telefonía, y también hay muchos fallos en la cobertura de los teléfonos móviles", ha significado el teniente de alcalde, quien confía en que "pronto se acuerden de este pueblo, donde ya no sabemos qué hacer", ha dicho el teniente de alcalde.

Por último, ha agradecido la ayuda recibida de los voluntarios de Protección Civil de la vecina localidad de Villasequilla y también la labor desarrollada por un vecino de Villamuelas que, con una máquina que tiene, está retirando nieve del pueblo "pero no da abasto", ha aseverado.

En estos momentos, en la provincia de Toledo hay 1.826 abonados sin suministro eléctrico y Villamuelas se encuentra entre los municipios más afectados, junto a los de Mora, Villanueva de Bogas y Lillo.