Irene Rosales, todavía esposa de Kiko Rivera, habla después de los rumores de ruptura que se difundieron en diferentes medios de comunicación. La modelo desmiente el ultimátum al hijo de Isabel Pantoja, una información que ha dado Lydia Lozano estos días en televisión: "No sé de dónde habéis sacado esas cosas, es totalmente incierto. "Y mucho menos nada de amistades".

La que excolaboradora de televisión insiste en que todo está bien en su matrimonio: "Estamos mejor que nunca y simplemente he pedido que necesito quitarme de la televisión y ha dado la casualidad de que alguien se ha inventado esto. Quiero apartarme de todo esto. No hay nada de crisis, no hay nada de nada".

También ha aprovechado para desmentir que se haya enfadado con su marido por haberse comprado un coche: "Nada, para nada". Y sobre el patrimonio de su marido, Irene Rosales responde con sentido del humor: "Si tiene un millón de euros que me de un poquito".

La pareja vuelve a ser el centro de atención desde que se dio a conocer el precio de su nuevo coche de lujo, un audi Q7 valorado en 80.000 euros. Una decisión muy cuestionada por la audiencia a la que mintió asegurando que estaba arruinado y que cobra una paga de 700 euros.