Entrevista

María del Mar Tomás, microbióloga: "Es aconsejable que los menores de 60 se pongan la cuarta dosis contra el COVID para evitar riesgos"

"La OMS y China deberán mantener en los próximos meses la vigilancia epidemiológica, mediante secuenciación, para detectar cualquier posible cambio en la evolución del virus", asegura la médico microbióloga del Chuac

La doctora María del Mar Tomás Carmona.

La doctora María del Mar Tomás Carmona. / Cedida

María de la Huerta

El anuncio de la reapertura de fronteras en China, este domingo, en medio de su peor ola de COVID, ha hecho saltar las alarmas a nivel mundial ante el temor de la aparición de nuevas variantes del SARS-CoV-2, lo que ha provocado el restablecimiento de medidas preventivas en países como España, Italia o Estados Unidos, así como un aumento de la vigilancia de casos. María del Mar Tomás Carmona, médico microbióloga del Complexo Hospitalario Universitario de A Coruña, investigadora del Instituto de Investigación Biomédico (Inibic) y portavoz de la Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica (Seimc), apela a la calma, debido a las “elevadas tasas de vacunación y de inmunidad híbrida” de la población española.

“Si se mantiene la situación epidemiológica asociada a subvariantes de ómicron, no deberíamos tener un importante incremento de hospitalizaciones”, considera la doctora Tomás Carmona, quien insiste, no obstante, en que la Organización Mundial de la Salud (OMS) y las autoridades sanitarias del gigante asiático mantener una estrecha “vigilancia epidemiológica, mediante secuenciación, de la evolución del virus en los próximos meses”.

¿Cómo podría afectar la explosión de contagios en China a España? ¿Hay motivos para la alarma?

En principio, las autoridades sanitarias de China han manifestado que las infecciones por COVID que afectan a este país son provocadas por subvariantes de ómicron, las cuales ya circulaban por Occidente previamente. Si se mantiene esta situación, podríamos estar tranquilos por nuestra alta tasa de vacunación completa (con tecnología de ARN mensajero), así como de inmunidad híbrida (tras la infección natural) en relación a dichas subvariantes.

¿Es posible que surjan nuevas variantes del SARS-CoV-2 más peligrosas que ómicron?

Es difícil de predecir ya que, en nuestro caso, la vacunación completa ha permitido la evolución del SARS-CoV-2 a subvariantes de ómicron con mayor capacidad de transmisión, pero menos virulentas. Se desconoce el impacto de las mismas, a largo plazo, en personas sin vacunación o sin inmunidad (tras la infección natural). La OMS ha declarado que las autoridades chinas deben mantener una vigilancia epidemiológica, mediante secuenciación, de la evolución del virus en los próximos meses.

¿Considera útiles los controles instaurados en los aeropuertos españoles por el Ministerio de Sanidad, consistentes en solicitar un test negativo a los viajeros procedentes del gigante asiático?

Los test tienen sus limitaciones, especialmente en relación con los resultados negativos. En pacientes infectados en periodo de incubación con baja carga viral o con una mala toma de muestra, podrían dar lugar a falsos resultados negativos. Por tanto, su valor radica, especialmente, en pacientes sintomáticos con resultado positivo.

¿Si China hubiese administrado a su población las vacunas de ARN mensajero, usadas mayoritariamente en los países occidentales, se podría haber evitado la actual situación?

Es posible. Las vacunas que han mostrado mayor eficacia frente a la enfermedad grave o la hospitalización, disminuyendo incluso la carga viral y los días de duración de los síntomas durante la infección, han sido las centradas en la tecnología de ARN mensajero, utilizadas especialmente en Occidente.

¿Se han precipitado las autoridades chinas al pasar de la política del “COVID cero” a la apertura actual?

Probablemente existiría un menor impacto en la morbi-mortalidad asociada a la infección por COVID en China si las restricciones asociadas a la estrategia “COVID cero” hubiesen sido eliminadas progresivamente, en combinación con la vacunación de la población, comenzando por los más vulnerables.

¿Convendría restablecer en España más medidas preventivas, como el uso de la mascarilla en todos los espacios cerrados, o lo ve atropellado?

En principio, debido a la alta tasa de infecciones respiratorias que se están produciendo en este periodo, no solo COVID, sino también por el virus de la gripe y el respiratorio sincitial (VRS), es aconsejable la utilización de mascarillas en pacientes vulnerables y en ambientes de inadecuada ventilación.

En este contexto, ¿es recomendable también que todos los ciudadanos menores de 60 años se pongan la cuarta dosis contra el COVID?

Sí, ya era aconsejable antes de la eliminación de la estrategia “COVID cero” en China, con el fin de evitar riesgos y hospitalizaciones.

¿Qué mensaje le gustaría trasladar a la población?

Simplemente, un mensaje de tranquilidad ya que, en principio, presentamos elevadas tasas de vacunación y de inmunidad híbrida (tras la infección natural). Gracias a ello, si se mantiene la situación epidemiológica asociada a subvariantes de ómicron, no tendríamos un importante incremento de hospitalizaciones. Por eso es importante que la OMS y las autoridades chinas mantengan la vigilancia epidemiológica mediante secuenciación del SARS-CoV-2 en los próximos meses, para estar alerta ante cualquier posible cambio en la evolución del virus.

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