Naturgy, pionera en el impulso y desarrollo de los gases renovables

Para alcanzar los objetivos comunes de descarbonización antes del 2030, es clave el impulso a los gases renovables, como el biometano o el hidrógeno. Estos gases permiten llevar la descarbonización a sectores difícilmente electrificables como la industria o el transporte

Naturgy, pionera en el impulso y desarrollo de los gases renovables

Naturgy, pionera en el impulso y desarrollo de los gases renovables

En España se calcula que, al menos, un 40% de las emisiones de CO2 no tienen alternativa sostenible y por eso, los gases renovables ofrecen una opción muy eficiente.

El biometano

El biometano es una energía verde con balance nulo de emisiones, que es totalmente intercambiable por el gas natural, por lo que puede distribuirse a través de la infraestructura gasista existente y emplearse con las mismas aplicaciones energéticas en hogares, industrias, comercios y también para movilidad en el transporte, contribuyendo a la descarbonización.

Su principal valor reside en que sus posibilidades de desarrollo son especialmente palpables en sectores de difícil electrificación por la naturaleza de sus actividades y en que permite el aprovechamiento de multitud de residuos, solucionando el problema de gestión existente en España e impulsando, por tanto, la economía circular.

Destaca su gran impacto en la economía circular y el cuidado del medio ambiente, ya que resuelve el problema medioambiental de las emisiones contaminantes asociadas a la gestión de residuos, cuyo gas generado se liberaba hasta el momento a la atmósfera. Además, valoriza residuos de origen urbano, de explotaciones agrícolas o ganaderas o de estaciones depuradoras de aguas residuales, creando modelos de economía circular donde el productor de los residuos también se ve beneficiado. En este sentido, es importante también remarcar que muchas de estas plantas se emplazan en zonas alejadas de grandes ciudades, por lo que contribuye al desarrollo económico del medio rural y a la cohesión territorial en zonas con retos demográficos.

España cuenta con un potencial de producción de biometano de 163 TWh/año, una cifra que permitiría cubrir en torno al 45% de la demanda nacional de gas natural y cuyo desarrollo podría haber supuesto un ahorro de unos 4.000 millones de euros a los consumidores en su factura energética en 2022, por la reducción de las compras a países terceros, según el Estudio de la capacidad de producción de biometano en España 2023, de Sedigas. Es más, el Plan REPowerEU de la Comisión Europea le otorga un papel protagonista en la consecución de los objetivos de independencia energética europeos, ampliando hasta los 35.000 millones de metros cúbicos el objetivo comunitario de producción para 2030.

Proyectos de biometano

Naturgy es pionera en el desarrollo del biometano en España, y desde 2014, desarrolla innovadores proyectos para conocer y reducir los costes de producción e impulsar la inyección de los gases renovables en la red de gas. La primera planta de biometano que la compañía puso en operación está en la estación depuradora de aguas residuales de Bens (A Coruña). La segunda instalación, Elena, ubicada en Cerdanyola del Vallès (Barcelona), fue la primera en inyectar a la red de gas de España gas renovable procedente de vertedero. 

Este año comenzará a producir gas renovable la planta de Vila-Sana, que se convertirá en la tercera instalación que la compañía opera comercialmente en España. La planta, ubicada en la explotación ganadera de Porgaporcs (Vila-Sana, Lleida), generará biometano para abastecer el consumo anual equivalente de 3.150 viviendas y evitará la emisión a la atmósfera de cerca de 2.500 toneladas de CO2 al año, inyectando 11,5 GWh/año a la red de distribución de gas.

Redes

La multinacional energética está convencida del valor estratégico del biometano en la transición energética e impulsa su desarrollo a través de toda su cadena de valor, desde la gestión del residuo y la producción del biogás, hasta la distribución y comercialización del biometano.

Nedgia, la distribuidora de gas del grupo, tiene en cartera más de 170 solicitudes para inyectar un volumen de gas renovable en su red superior a los 6,5 TWh, una cifra equivalente al consumo anual de 1,3 millones de hogares. En 2022, el Grupo disparó un 90% el gas renovable distribuido a través de cuatro módulos de inyección ubicados en Cataluña, Castilla y León y Galicia, alcanzando los 35 GWh y evitando la emisión a la atmósfera de 7.400 toneladas de CO2. Además, Nedgia trabaja en la construcción de siete adicionales con las que elevará la capacidad de suministro hasta los 316 GWh próximamente.

La mayor presencia de gas renovable en la red de gas de Naturgy coincide con el desarrollo de nuevos proyectos de producción de biometano, una energía derivada del tratamiento de los residuos generados por la actividad industrial, agrícola y ganadera y las aguas residuales, clave para lograr los objetivos de descarbonización comprometidos por España y la Unión Europea.

Este gas renovable ofrece la ventaja de proporcionar una enorme flexibilidad, lo que permite aprovechar la extensa infraestructura gasista de transporte y distribución existente, reduciendo el esfuerzo inversor y de adaptación para lograr su rápida penetración. Nedgia es líder en España en distribución de gas, con una red superior a los 55.000 kilómetros que podría hacer llegar el gas renovable de manera inmediata a más de 5 millones de viviendas repartidas en 1.100 municipios y 11 comunidades autónomas.

El hidrógeno verde

El hidrógeno verde o renovable se consigue principalmente mediante electrólisis, que consiste en la separación del hidrógeno del oxígeno que hay en el agua a través de electricidad renovable. Lo más determinante es que este proceso se alimenta en su totalidad por energía renovable, por lo que no genera ningún tipo de emisión contaminante a la atmósfera y es el hidrógeno más limpio y sostenible.

Constituye una solución sostenible clave para la descarbonización de la economía, y es parte de la solución para lograr la neutralidad climática en 2050 fijada en el Pacto Verde europeo.  Está llamado a ser un valioso vector energético para usos finales donde sea la solución más eficiente en el proceso de su descarbonización, como la industria intensiva en hidrógeno y procesos de alta temperatura, transporte pesado de larga distancia, transporte marítimo, transporte ferroviario o aviación. Además, su cualidad de vector energético le otorga gran potencial como instrumento para el almacenamiento energético y la integración sectorial.

Proyectos de hidrógeno

Asimismo, la multinacional energética lleva años investigando el desarrollo del hidrógeno y, durante 2021, ha trabajado en el desarrollo de grandes centros de producción de hidrógeno renovable. Algunas de estas iniciativas están vinculadas a zonas de Transición Justa. El objetivo de estos centros multi-demanda es empujar el desarrollo de nuevos mercados para consumos directos en industria, inyección en la red de gas para su comercialización con garantías de origen, movilidad o producción de derivados del hidrógeno (amoníaco, metanol, etc).

Es el caso de la alianza que Naturgy está impulsando con Repsol y Reganosa para desarrollar un centro de producción de hidrógeno renovable en Galicia. El proyecto contempla la instalación de una planta de electrólisis alimentada con energía 100% renovable en los terrenos de la antigua central térmica de Meirama, en el municipio de Cerceda (A Coruña).

Por otro lado, la compañía trabajará conjuntamente con Enagás para impulsar en León la mayor planta de hidrógeno de España, con el objetivo de producir hasta aproximadamente 9.000 toneladas al año de hidrógeno renovable, a partir de una planta fotovoltaica de 400 MW y un electrolizador de hasta 60 MW, para cubrir consumo local, inyección a red gasista y posibilitar una futura exportación hacia el noroeste de Europa.