Pasa horas atrapado en un ascensor durante el apagón y su vecina denuncia lo que pasó: "Mejor me guardo mi opinión"

El apagón eléctrico registrado el pasado 28 de abril en toda España y que incluso se extendió a Portugal dejó a millones de personas sin luz en la península ibérica. Entre la oscuridad y el caos de aquel día, sin embargo, emergieron historias humanas que han obtenido un gran impacto en redes sociales y que se han hecho virales.

Una de ellas fue la vivida por Julia, una joven creadora de contenido conocida en Instagram como @gilevych y que, a raíz de lo que pasó el 28 de abril, se ha convertido en ejemplo de solidaridad durante las horas de la emergencia energética.

Atrapado en el ascensor durante el apagón

Todo sucedió una vez que se fue la luz el pasado 28 de abril. Tras el apagón eléctrico, Julia se percató de que su vecino, un hombre mayor llamado David, había quedado atrapado en el ascensor de su edificio.

Lejos de quedarse de brazos cruzados, la joven decidió intentar ayudarle y, dado que no pudo rescatarlo del interior del ascensor, optó por acompañarle durante las dos largas horas que duró el incidente. ¿Cómo lo hizo? Estando junto al ascensor y hablando a David desde el exterior para que no se sintiera solo, calmándolo e intentando buscar soluciones para ayudarle a sobrellevar una situación tan incómoda y estresante.

Su vecino, que al principio tenía incluso dificultades para respirar, encontró pronto consuelo en la presencia constante de Julia, que no salía de su asombro al comprobar el comportamiento del resto de residentes en el edificio.

"Un vecino se queda atrapado entre dos plantas en el ascensor, en mitad del mayor apagón de España, y ni un vecino intenta ayudar", critica la joven, visiblemente molesta por la falta de empatía de los otros residentes.

Decidida a ayudar a David como fuese, Julia se armó con un martillo y, con la ayuda de éste, logró forzar ligeramente la puerta del ascensor para ventilar el espacio y más tarde, incluso, consiguió pasarle una botella de agua. Sin embargo, la joven creadora de contenido seguía sin dar crédito a la falta de ayuda por parte de los otros vecinos: "Yo me quedo atrapada y la gente me da la espalda... y se quedan sin felpudos”, bromeaba con ironía en sus redes sociales.

Afortunadamente, la historia tuvo un final feliz tras dos horas de espera en el ascensor, puesto que un amigo de Julia, también vecino del edificio, subió para ayudarla y, entre ambos, consiguieron liberar a David. Lo primero que hizo él al salir fue abrazarla y darle las gracias por sus esfuerzos y su empatía.

Este relato, viralizado tras el apagón eléctrico masivo que España vivió el 28 de abril, es solo una de las muchas vivencias personales que dejaron esas horas de incertidumbre en las que nadie acertaba a saber con exactitud qué estaba ocurriendo. La historia demuestra, una vez más, que incluso en los momentos más difíciles, la solidaridad entre las personas se impone por encima de cualquier circunstancia, por adversa que esta pueda parecer.