Pese a que desde el punto de vista clínico ha mostrado una notable mejoría del cuadro de intoxicación alcohólica que motivó su internación, "todavía está en el período de abstinencia alcohólica, la necesidad es imperiosa de mantenerlo sedado", explicó en conferencia de prensa el doctor Héctor Pezzella, director del sanatorio Güemes de esta capital.

En ese sentido, Maradona está lúcido por breves períodos de "cinco a 10 minutos en tres o cuatro oportunidades en el día", explicó Pezzella, en el que fue el segundo informe sobre la salud del ex jugador dado a la prensa en el día.

En esos momentos, el "Diez" "a veces pide comida, a veces pide bebida y pregunta ´cuándo me voy a ir´, pero sin agresividad", aclaró el médico.

Horas antes, se informó a través de un parte médico que Maradona muestra una "buena evolución del cuadro de hepatitis tóxica alcohólica" y que los estudios a los que es sometido a diario "demuestran una franca mejoría".

Pezzella confirmó ayer hubo una petición del médico personal de Maradona, Alfredo Cahe, de que "traten de dejarlo solo en la habitación".

Explicó que hasta ahora los familiares y allegados autorizados "lo visitaban en forma periódica". "Eso en los momentos de vigilia generalmente lo excita, lo pone más tenso. Por una cuestión de precaución hacia el paciente, se trató de resguardar eso y por eso se trata de que no lo visiten", expresó.