La policía nacional, en colaboración con agentes de la policía federal de EE.UU. detuvieron hace unos días en el aeropuerto de Manises a un hombre con doble nacionalidad americana y colombiana, buscado por las autoridades estadounidenses por tráfico de drogas. El arresto fue posible gracias a que una policía del FBI entabló una amistad ficticia con el acusado a través de internet y organizó un encuentro en España.

La agente federal encubierta contactó con el sospechoso, identificado como Danny D., hace unos meses a través de una página de contactos de internet. Durante meses, la mujer mantuvo una relación de amistad en la distancia con el presunto delincuente, manteniendo en todo momento su identidad falsa, para ganarse poco a poco la confianza de éste.

De esta forma, y tras mantener el contacto durante varios meses, la agente del FBI organizó un encuentro en España, lugar donde residía el sospechoso. La mujer, que decía vivir en Miami, engañó al sospechoso con el argumento de que tenía que viajar a España y quería conocerlo.

La cita tuvo lugar el pasado 23 de mayo cuando el hombre fue a recoger a su amiga virtual al aeropuerto de Manises. Allí le esperaban agentes de la policía nacional española, alertados por su colega del FBI, quienes tras producirse el encuentro procedieron a su detención. El sospechoso no se lo puso fácil a la policía y ofreció fuerte resistencia, según apuntaron testigos del suceso. De hecho, al intentar escapar, el acusado llegó a agredir a uno de los agentes. El detenido, a quien también se le imputa un delito de atentado a agente de la autoridad, tenía una requisitoria de los juzgados de Massachusetts por tráfico de cocaína.

El padre, asesinado por un cártel

Según ha podido saber este periódico, la vida de Danny D. ha estado marcada por las drogas y la violencia. Hace aproximadamente un año su padre fue asesinado, presuntamente, por miembros de un cártel de de la droga de Colombia.

El acusado pasó a disposición del Juzgado de Instrucción número uno de Quart de Poblet. Tras tomarle declaración, el juez ordenó su ingreso en prisión y se inhibió en favor del Juzgado Central de Instrucción número cuatro de la Audiencia Nacional, quien tramitará la orden de extradición.