Una joven de 18 años se entregó voluntariamente en la comisaría de policía nacional de Mislata el pasado miércoles para confesar que un día antes había realizado una denuncia falsa. La muchacha había denunciado ser víctima de un robo con violencia e intimidación en el cual su supuesto asaltante la obligó a sacar dinero de un cajero.

Sin embargo, la realidad era bien distinta. La joven, según reconoció posteriormente, sacó 180 euros de la cuenta bancaria de su madre por iniciativa propia. Según parece, la denunciante, en paro y con necesidades económicas, cogió el dinero de su madre para gastos personales.

Como no se atrevía a decirle que se había gastado los 180 euros, la joven supuestamente se inventó una curiosa historia de un robo. Según le manifestó a su madre, cuando iba por la calle un hombre la asaltó a punta de navaja y bajo amenazas la llevó a un cajero próximo. Una vez en la sucursal bancaria, el atracador imaginario le obligó a sacar 180 euros de la cuenta.

La madre le insistió en que si eso era cierto debía denunciarlo cuanto antes. De esta forma la mujer acompañó a su hija a la comisaría de Mislata para que presentara la correspondiente denuncia.

No obstante, tras darle vueltas al asunto, la muchacha se arrepintió y fue a quitar la denuncia a la comisaría. Allí fue detenida por simulación de delito.