Efe/Teresa Bouza, Washington

Cho Seung-Hui, el estudiante surcoreano de 23 años que según la policía ha cometido la mayor masacre de la historia en un centro de estudios de EE UU, era una persona «solitaria» , un rasgo que según los expertos es común entre los asesinos en ma sa. «Era solitario», dijo ayer de él Larry Hincker, uno de los vicepresidentes de la Universidad Politécnica de Virginia. Seung-Hui cursaba el último año de filo logía inglesa. Una de sus profesoras recordaba ayer a la prensa el tono perturbador de algunos de sus ejercicios literarios, hasta el punto de que sus instruc tores le aconsejaron recibir ayuda psicológica.

Aparte de eso, es poco lo que por el momento se sabe del estudiante, que llegó a Estados Uni dos con su familia en 1992, cuando tenía ocho años. El joven mantenía su nacionalidad original y tenía una «tarjeta verde», un documento que permite trabajar legalmente en EE UU por un período indefinido.

Su familia, según informó ayer la prensa local, vive en Centreville, un barrio acomodado del estado de Virginia a unas cuatro horas de distancia de la Universidad Politécnica, en una de cuyas residencias estudiantiles vivía el joven que protagonizó la sangrienta matanza.

Los vecinos también lo describen como un alma solitaria. «Era muy callado, estaba siempre solo», dijo de él Abdul Shash, un residente de Centreville, cuyas declaraciones recogía el diario The Roanoke Times . Según Shash, a Seung-Hui le gustaba jugar al baloncesto y no respondía cuan do alguien lo saludaba.