Un joven de 26 años, de origen africano, falleció ayer por la tarde ahogado cuando se encontraba tomando el baño en la depuradora de la presa de Manises. Al parecer, las fuertes corrientes de agua de la zona resultaron fatales y provocaron su muerte.

De hecho, otro muchacho, menor de edad, estuvo a punto de ahogarse también pero fue rescatado por su padre, quien se lanzó al agua al oir sus gritos de auxilio, según apuntaron fuentes conocedoras de lo ocurrido.

El accidente se produjo a las 16.00 horas de ayer cuando se encontraban cuatro personas, entre ellas dos menores, bañándose en la presa de Manises-Riba-roja, en el Parque Natural del Túria. Según explicaron fuentes policiales, en esta zona está prohibido el baño pero hay mucha gente que hace caso omiso a esta prohibición y acuden a refrescarse a la depuradora que hay junto a la presa.

En un momento dado, uno de los menores comenzó a gritar que se estaba ahogando, al parecer, fruto de las corrientes de la zona. El padre del menor, de entre ocho y nueve años, se tiró al agua y fue rápidamente a socorrerlo.

Sin embargo, el hombre no pudo hacer nada por salvar la vida del joven, de origen africano, que también estaba siendo arrastrado por la corriente.

Los presentes dieron el aviso a la policía y en pocos minutos acudieron al lugar de los hechos varias patrullas de la Policía Local de Manises. Asimismo, al encontrarse en zona de la Benemérita, fue alertada también la Guardia Civil.

El Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS) de la Guardia Civil se desplazó a la zona ya que el ahogado había quedado atrapado bajo el agua y fue necesario el trabajo de los buzos para localizarlo.

A las 19.30 horas el equipo de buzos de la Guardia Civil logró sacar el cadáver del agua. El hombre fue identificado como K. M .Y., de 26 años y vecino de Xirivella.

En agosto de 2009 otro hombre de 48 años falleció al quedar atrapado en el interior de un tubo de hormigón en el río Túria, a su paso por Riba-roja, cuando practicaba "hidrospeed".