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La muerte sorprendió a José Peiró Ciurana, de 74 años de edad, de la manera más insospechada. El septuagenario, que llevaba desaparecido desde hace una semana, quedó atrapado en un granado mientras supuestamente cogía granadas de un árbol situado frente a su casa, en el camino Caminot de Valencia. El hombre quedó colgando cabeza abajo a la altura de una acequia al quedarle la pierna enganchada en una de las ramas, según explicaron testigos del rescate.

Pese a encontrarse a escasos metros de su vivienda y la de su hermano -que reside junto a él-, nadie se percató de su estado en los días que estuvo allí atrapado. La frondosidad del árbol y que se trata de un camino poco transitado se aliaron para que nadie pudiera prestar asistencia al septuagenario hasta varios días después de su muerte.

La última vez que sus familiares lo vieron con vida fue el pasado lunes 4 de octubre. Desde entonces nada habían vuelto a saber de él. "Yo me pasé el martes para buscarlo para ir al bar pero ya no estaba", explicó Eduardo, hermano y vecino del fallecido.

Al día siguiente los familiares del hombre, que vivía solo y no tiene hijos, presentaron una denuncia por desaparición en una comisaría de policía nacional.

Sus familiares confesaron que habían acudido casi a diario a su casa por si regresaba pero ninguno de ellos descubrió que se encontraba justo detrás del árbol que hay frente a su propio domicilio. "Si hubiera caído a esta acequia alguien lo habría visto al pasar por el camino pero ahí, donde ha ido a parar, era muy difícil verlo", se lamentó su hermano.

Agentes de la policía nacional, que realizaban una batida por la zona durante las gestiones por su desaparición, encontraron el cadáver ayer por la tarde. El cuerpo se hallaba a escasos 10 metros de su casa, boca abajo y con una pierna enganchada en la rama de un granado.

Al parecer, se sospecha que el septuagenario se acercó al árbol a coger un fruto y resbaló de forma accidental quedando atrapado por las ramas. Además, sus familiares apuntaron que sufría una embolia, lo que agravó su estado.

Se desconoce la data exacta de la muerte, hecho que determinará la autopsia que se le realizará hoy en el Instituto de Medicina Legal de Valencia. Asimismo, la necropsia confirmará la causa exacta del fallecimiento.

Reconocido por el reloj

El hombre llevaba un reloj en la muñeca, objeto que sirvió para que la familia confirmara su identificación. Asimismo, fue necesaria la presencia de los bomberos para rescatar el cuerpo sin vida de José. Con una sierra de carpintero los bomberos cortaron la rama que sujetaba la pierna del fallecido y así pudieron bajar al finado.

A las 18.30 horas de ayer la forense autorizaba el levantamiento del cadáver. Al mismo tiempo otros familiares del difunto llegaban al lugar de los hechos. "Yo no lo he visto nunca entrar ahí, me extraña que fuera a coger "magranes"", confesaba el sobrino de José. "Eso te pasa a ti y te revuelves hasta salir, pero en su estado".