Un bebé muerto, una decena de heridos y dos detenidos fue el balance ayer de un extraño suceso ocurrido la madrugada del viernes en las afueras de París, en el que once personas cayeron o saltaron por un balcón de un segundo piso, aparentemente tras creer haber visto al diablo.

La niña de cuatro meses falleció a causa de las contusiones varias horas después de que ocurrieran los hechos en una vivienda social de la localidad de La Verrière, al suroeste de la capital francesa, según la Fiscalía de Versalles, que advirtió de que sólo contaba por el momento con la versión de uno de los presentes.

Se trata del padre de familia, al que, según la versión que ha dado a la policía, su mujer confundió con el diablo cuando se levantó desnudo a preparar un biberón para su hijo, precisó ante la prensa la fiscal Odile Faivre.

Su mujer, que gritó al verlo "¡el diablo, el diablo!", lo hirió de seriedad en la mano con un cuchillo, y con las otras personas -como él de origen africano- lo sacaron del apartamento. Se supone que fue entonces, al tratar de volver a entrar en el piso, cuando once personas -incluidos dos niños- huyeron saltando por el balcón.

La Policía, que no ha encontrado drogas y tampoco pistas de que se estuviera celebrando en la casa una sesión de espiritismo, detuvo al padre de familia.