La celebración de un cumpleaños en un piso de Mislata se cortó de cuajo cuando todavía no habían sonado las doce campanadas de la noche. A las 23.30 horas, tras la llamada de un vecino, la Policía Local acudió a una vivienda de la calle Mariano Benlliure en la que decenas de jóvenes -la mayoría de origen guineano y muchos de ellos de nacionalidad española- asistían a la fiesta.

Después acudió la Policía Nacional, que inició la identificación de los chicos, ya en la calle. Y todo ello para sorpresa de los asistentes al cumpleaños, puesto que desde el primer momento señalaron que no estaban haciendo na­da malo. Escuchaban música y en un horario todavía prudente.

En la calzada se inició la bronca en la que se vieron implicados varios jóvenes y agentes. Ocho vehículos policiales y una unidad antidisturbios acudió al vial. Chicos y chicas fueron reducidos con porras. Hubo varios contusionados entre los que se contabilizaron tres agentes. También acudieron refuerzos de las policías de municipios vecinos. Según los participantes, en la fiesta había unas 24 personas en el piso. Según fuentes policiales la cifra se elevaría a 50.

Reducidos

Tras el enfrentamiento fueron detenidos tres chicos y una chica de entre 20 y 28 años. Tres de nacionalidad española y uno de nacionalidad guineana. Durmieron en las dependencias policiales de Zapadores, en Valencia. Por la mañana pasaron a disposición judicial en Mislata y quedaron en libertad con los cargos de desobediencia a la autoridad y por presuntamente haber lesionado a una agente.

Otra joven presentó una denuncia en el juzgado por los golpes recibidos, mientras que los detenidos se quejaban de las contusiones en las piernas y de los agarrones en el cuello. A uno de ellos le requisaron el teléfono móvil con el que habría registrado la actuación de los policías. Después se lo devolvieron.