No existían denuncias previas, pero los vecinos de Elisa P. y José Julián G. T. sabían de sus disputas. En varias ocasiones, habían telefoneado a la Policía Local ante los ataques de José Julián. Sin embargo, como en casi todos los casos de violencia machista, ninguno esperaba un final tan trágico. José Julián G. T., de 49 años de edad y vecino de Guadassuar, se entregó ayer a las 9.30 horas a la Guardia Civil de Carlet tras confesar que había matado a su expareja, Elisa P., también de 49 años y natural de Alzira, en su domicilio de Guadassuar, donde ella residía desde hacía varios años.

Fuentes policiales aseguraron a Levante-EMV que la muerte de la mujer se produjo por una herida de arma blanca. El hombre también presentaba heridas cuando se entregó, por lo que fue trasladado al Hospital Universitario de la Ribera de Alzira. Según fuentes del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV), José Julián G. T. no pasará a disposición judicial hasta el lunes. No obstante, el juzgado de Instrucción número 1 de Alzira, en funciones de guardia, abrió ayer una causa por esta muerte. Aunque no constan antecedentes anteriores por denuncias de la víctima, el hombre sí tenía antecedentes de violencia de género con una pareja anterior, hechos por los que fue condenado en 2004 a 6 meses de prisión y un año de alejamiento.

Reanimación sin éxito

Una unidad del Servicio de Atención Médica Urgente (SAMU) se desplazó hasta el domicilio de la víctima en la calle Riu Magre de Guadassuar después de que José Julián G. T. confesara los hechos en el cuartel de Carlet. Sin embargo, no se pudo hacer nada por salvar la vida de la mujer, que ya había fallecido.

Sus vecinos nada escucharon en la madrugada del sábado. "Nosotros llegamos a las 3 de la madrugada y estuvimos esperando a mi hijo, que llegó sobre las 5, y no oímos nada", indica uno de los inquilinos del número 5 de la calle Riu Magre. Tampoco habían visto últimamente ni a Elisa ni a José Julián.

Separados y con hijos

Ambos estaban separados y tenían un hijo de matrimonios anteriores, los dos ya mayores de edad (rondaban los veinte ños). El hijo de Elisa vivía con su madre. Cuando se produjo la agresión, el joven no estaba en la vivienda. "Esa noche se había ido a casa de su novia", comenta una vecina. Ayer permaneció durante toda la jornada en casa de una amiga íntima de su madre.

Elisa trabajaba en un industria dedicada a la fabricación de productos cosméticos en el polígono de Guadassuar. A veces acudía a un pub del que era propietaria una amiga para "echarle una mano", indicó a este diario una vecina, que recuerda a la víctima como una "chica normal".

El hijo de José Julián residía asimismo con su madre, una mujer de origen francés que reside en Guadassuar, donde el matrimonio se trasladó procedente del país vecino hace cerca de una década para asentarse. Una vecina de la exmujer explicó ayer a este diario que nunca se habían producido problemas entre el matrimonio durante los años que vivieron juntos en su edificio. La pareja se separó hace aproximadamente cinco años, detalló.

El presunto agresor trabajaba también en Guadassuar en un negocio familiar. No obstante, "faltaba mucho al trabajo", explicó una vecina.

El alcalde de Guadassuar, José Ribera, indicó a este rotativo que desconocía que existieran discusiones entre la pareja.