La Audiencia Provincial de Valencia ha condenado a seis años y medio de prisión a dos hombres, de nacionalidad rumana, por falsificar tarjetas de crédito y estafar 23.905 euros en cuatro meses en distintos comercios de Valencia. Además, esta misma sentencia impone penas de entre dos años y dos años y medio de cárcel a seis comerciantes valencianos que actuaron en connivencia con los falsificadores.

El resto de los catorce acusados por estos hechos, cometidos entre agosto y noviembre de 2010, han sido condenados respectivamente: A dos años y nueve meses uno de ellos por uso de tarjeta de crédito falsificada, y a un año y tres meses para dos mujeres y un hombre por uso de tarjeta de crédito falsa en grado de tentativa. Asimismo otras dos mujeres también imputadas resultaron absueltas.

Los comerciantes condenados -tres hombres y tres mujeres- son los dueños de cuatro perfumerías de Valencia, una joyería de Carcaixent y una tienda de ropa también situada en la capital de Túria. Según ha quedado probado en la sentencia de la Sección Tercera de la Audiencia Provincial, los propietarios de estos comercios sabían de la procedencia ilegal de estas tarjetas y facilitaban a los otros acusados el pago con las mismas a cambio de una parte del importe de las ventas o simplemente por el beneficio que obtenían de la venta de dicho producto.

Catorce detenidos

A finales de noviembre de 2010 la policía nacional desmanteló esta red de falsificadores que operaba en Valencia tras la detención de catorce personas, siete hombres y siete mujeres. Entre ellos se encontraban seis comerciantes valencianos y las personas de nacionalidad rumana encargadas de usar las tarjetas falsas con la connivencia de los primeros.

La banda de falsificadores logró realizar compras por valor de 23.905 euros con las tarjetas de crédito y débito que previamente dos de ellos habían duplicado con un lector-grabador. Para estas dos personas, dos hombres de nacionalidad rumana, la Audiencia Provincial les ha impuesto cuatro años y medio de cárcel por el delito de falsificación de tarjetas, y dos años más por el delito continuado de estafa.

Respecto a los seis comerciantes que actuaron en connivencia con los estafadores, la Sección Tercera condena a tres de ellos a dos años y seis meses de prisión por el delito de uso de tarjeta de crédito falsificada y a los otros tres los condena a sólo dos años de cárcel por el mismo delito, al aplicarles la circunstancia atenuante de reparación del daño causado.