La juez envía a la cárcel a los padres del bebé de Valencia por asesinato

La titular del juzgado de instrucción número 12 de la Ciudad de la Justicia de Valencia decretó ayer prisión provisional, comunicada y sin fianza para la pareja que fue detenida el viernes como autores de la muerte de su recién nacido. Como avanzó en primicia el sábado Levante-EMV, la joven española Elisenda R. D. ,de 26 años, fue atendida el jueves en su vivienda de la calle Quart, donde los servicios sanitarios la encontraron con su bebé sin constantes vitales.

El avance de la autopsia determinó que la niña había fallecida de forma violenta y por ello, tanto ella como su compañero sentimental, Jorge, A. I. D. , de 29 años y nacionalidad ecuatoriana, fueron arrestados por agente sde la Policía Nacional.

Ayer pasaron ambos a disposición judicial en la Ciudad de la Justicia, para declarar. El proceso duró varias horas y no se supo el fallo hasta cerca de las 16 horas. Según pudo saber este periódico los testimonios de ambos mantuvieron coherencia y no hubo un intento de acusación por parte de ella ni su pareja.

Continúa la investigación

Los jóvenes han sido acusados de homicidio doloso, si bien todavía no se ha determinado el grado de tenativa. El caso pasará esta semana al juzgado de instrucción número 9, y todavía habrá que esperara a tener el informe definitivo de la autopsia realizada a la recién nacida, puesto que los datos a día de hoy proceden de un avance, que ya determinó que la pequeña no murió como consecuencia de complicaciones en el parto, sino de una forma violenta, apuñalada en el pecho con un puzón de manualidades, del cual se incautó la Policía Nacional durante la inspección del domicilio.

La pareja, que mantiene una relación desde hace cerca de un año, vivía alquilada desde hacía poco en la primera planta de un edificio frente al Jardín Botánico. Según explicaron los vecinos consultados por este diario, se trata de un edificio en el que todos los inquilinos viven alquilados, bien por días, semanas o meses, y que no les conocían al ser una comunidad en la que todos los inquilinos están de paso.

La joven sostuvo en todo momento ante la llegada de los servicios sanitarios y la policía que desconocía que estuviera embarazada.

Según han podido saber este diario, la joven estaba en avanzado estado de gestación, pasado el octavo mes, y hace tiempo había realizado un aborto voluntario.