Diez de los once asaltantes de un chalé en Oliva admitieron ayer su participación en el robo. El juicio no se pudo cerrar con una conformidad porque el undécimo acusado insiste en que no tuvo relación con el asalto. La Fiscalía pide inicialmente para los acusados penas que oscilan entre los cinco años y ocho meses de cárcel y más de ocho años de prisión por los delitos de robo con violencia, allanamiento de morada, detención ilegal, tenencia de armas y una falta de lesiones.

Los hechos ocurrieron en abril de 2009. Los asaltantes se sirvieron de la información que les facilitó una de las acusadas, que trabajaba como empleada doméstica en la casa. Los procesados accedieron a la vivienda aprovechando que los propietarios estaban fuera y amenazaron con dos pistolas a otra asistenta que se hacía cargo del cuidado de un bebé de un año. El juicio terminará el 15 de enero.