A sus 42 años de edad ya ha sido denunciada dos veces por un presunto delito de abandono de familia. La última vez se produjo el pasado lunes, después de una discusión con su hijo de 17 años en la que, al parecer, la madre llegó a lanzarle un teléfono móvil que le hirió en la cara, y por el que requirió asistencia en un centro sanitario.

Tras ser alertados por el 091 de una disputa en una vivienda, agentes de la Policía Nacional acudieron hasta allí y encontraron con ellos a la otra hija de la mujer: Un bebé de unos 15 meses que «presentaba síntomas de desnutrición y descuido», según un comunicado de la policía, pero que sigue bajo tutela de su progenitora, como acordó ayer la titular del Juzgado de Instrucción número 1 de Sagunt, además de poner en libertad a la arrestada.

Los agentes, según la versión policial, «averiguaron que el menor, en compañía de su hermana de 15 meses, vivían en estado de abandono desde hacía algún tiempo ya que la madre no se ocupaba de ellos, llegando a subsistir de la ayuda de familiares y amigos, careciendo el piso de luz eléctrica». Además, al parecer, «el bebé no era alimentado correctamente».

Por todo ello, la mujer fue arrestada, mientras los dos menores fueron entregados a su abuela. Ayer el juzgado acordó la suspensión provisional de la patria potestad y la tutela respecto del mayor, dejándola en manos de su abuela. Sin embargo, ya no acordó ninguna otra medida respecto a los otros hijos de la mujer, aunque sí puso en conocimiento de la fiscalía y de los servicios sociales la situación del conjunto de la familia, según fuentes del Tribunal Superior de Justifica de la Comunitat Valenciana.

Ayer por la tarde, algunos vecinos del barrio de Baladre ya afirmaron a Levante-EMV haber visto a la mujer por el barrio y decían no entender que el juez le hubiera mantenido la custodia de su hija de 15 meses. «Eso es lo peor que podía haber pasado», apuntaba uno de ellos. «No es que la tenga abandonada, como al chiquillo de 17 años, que vive solo hace tiempo y se está perdiendo, yendo con malas compañías, porque nadie está encima de él. Pero a la niña nada más que le da biberones y la lleva detrás porque no tiene con quien dejarla, porque ella va muy a la suya», decían otros, mientras varios vecinos de su patio declinaban hacer declaraciones y afirmaban «ni saber, ni haber oído nada».

La mujer detenida que, al parecer tiene un tercer hijo, ya fue denunciada en julio de 2011 por un supuesto abandono familiar en Sagunt.

La discusión que acabó con su arresto, según fuentes cercanas al caso, se inició porque el menor de 17 años quería alquilar una habitación del piso a otro joven y ella se enfadó. En el barrio se aseguraba que la abuela del joven era la que iba muchas veces a llevarle comida y, por los testimonios recogidos por la policía, parece ser que el chico llevaba unos tres meses sin recibir dinero para su manutención.