El tribunal popular halló ayer culpable de un delito de asesinato al acusado de degollar y asestar 36 puñaladas a su pareja sentimental en el puerto de la Albufera de Catarroja. El jurado advirtió en su veredicto de que el acusado aumentó el dolor de la víctima de forma deliberada. La fiscal del caso pidió al acabar la lectura del veredicto de culpabilidad que el procesado sea condenado a 22 años de prisión. El magistrado que presidió el juicio concretará la pena en la sentencia que dictará en los próximos días. El acusado admitió el crimen en el juicio, pero insistió en que no era consciente de sus actos porque sufrió un trastorno mental. Sin embargo, el jurado entiende que no actuó enajenado.

Los hechos ocurrieron el 12 de noviembre de 2010. La pareja había ido a dar un paseo al puerto de la Albufera y en un momento determinado ella rompió a llorar por unos problemas familiares que dificultaban su relación. El hombre, que había acudido a la cita armado con un cuchillo de cocina, aprovechó que ella agachó la cabeza para ponerla en su regazo en busca de consuelo para asestarle dos puñaladas en el cuello. Después, el imputado dio una treintena de puñaladas a la víctima.

El acusado negó en el juicio el noviazgo con la víctima y aseguró que solo eran amigos, aunque cuando declaró ante la Guardia Civil sí admitió la relación sentimental. El jurado entiende que sí eran pareja por las declaraciones que prestaron los familiares de la mujer asesinada.

El homicida confeso manifestó que cogió «instintivamente» el cuchillo de cocina de su casa, pero insistió en que no había planeado matar a la mujer. «Me encontraba muy mal psicológicamente. Una semana antes del crimen intenté suicidarme y estuve dos días en coma. La depresión me hacía perder la cabeza», destacó. A pesar de ello, el jurado considera que no está probada la enajenación que permitiría su ingreso en un psiquiátrico.

Pilar de la Horadada

Por otra parte, la Audiencia de Alicante ha condenado a 18 años de prisión a un hombre acusado de matar a golpes a su expareja sentimental en el interior del bar que compartían en el municipio alicantino de Pilar de la Horadada en la madrugada del 16 de junio de 2010, según informó la agencia Efe. El juicio por esta causa se celebró a mediados de octubre con jurado popular, que emitió un veredicto de culpabilidad tras la vista oral. El procesado, de nacionalidad alemana, compartía el negocio hostelero con la víctima, con la que, además, había tenido una relación sentimental en el pasado.