Unos 65 millones de niñas no van al colegio, 39.000 se ven obligadas a casarse cada día, 140 millones de mujeres han sufrido mutilación genital y las menores de 16 años son víctimas de la mitad de las agresiones sexuales que se producen en el mundo.

Con estos datos, la directora de Plan Internacional, Concha López, denuncia en una entrevista con Efe, con motivo del Día Internacional de la Mujer, que las niñas son «pobres entre las pobres» por la falta de acceso a una educación de calidad, la violencia o los embarazos preadolescentes.

«Muchas de las niñas y mujeres de los países en desarrollo no han tenido infancia. Son adultas desde que empiezan a andar. Cuidan a sus hermanos con 4 ó 5 años. No tienen sueños, no pueden jugar y no tienen un desarrollo social normal», subraya López.

La directora de Plan Internacional llama la atención sobre la situación de las niñas que son obligadas a casarse antes de la primera menstruación con hombres que les doblan la edad, aquellas a las que les practican la ablación, las se quedan embarazadas en la adolescencia y mueren al dar a luz o las que son forzadas a trabajar en «esclavitud» en el servicio doméstico.

López muestra su deseo de que entre los Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas se consiga garantizar tres años de educación secundaria gratuita y universal de calidad para las niñas, lo que contribuiría a «romper el círculo de la pobreza».

Un año más de estudios supone un 10 ó un 20 por ciento más de ingresos para las mujeres, que dedican el 90 por ciento de sus remuneraciones a su propia familia, frente al 30 por ciento de los hombres.