Efectivos de la Guardia Civil localizaron ayer en las inmediaciones de Cala Redonda, en la zona de calas de Torrevieja, restos óseos que podrían ser humanos, ya que el hallazgo se produjo entre ropajes de mujer en el fondo marino. Un submarinista dio la voz de alarma a un compañero que aguardaba en la playa, y que fue quien avisó a las fuerzas de seguridad sobre las 13.40 horas tras encontrar fragmentos de hueso dentro de ropajes y un cinturón.

Dos patrullas terrestres de la Guardia Civil, acompañadas de una patrullera marina se desplazaron hasta el lugar. El difícil acceso de la embarcación al tratarse de una zona rocosa obligó a los agentes a trasladarse a nado al punto exacto donde el buzo encontró los restos, para señalizar, con una boya y a pocos metros de la costa, el lugar en el que el buzo localizó los restos para facilitar el posterior rastreo del Grupo de Actividades Subacuáticas de la Guardia Civil.

Esta unidad acudió al lugar sobre las 18.30 horas, y poco antes de las 19 horas extrajeron a la superficie hasta tres bolsas. Una con restos óseos, otra con diferentes ropajes, y una tercera por determinar, según ha podido conocer este diario.