La mujer reconoció los hechos ante la sección cuarta de la Audiencia de Valencia, por lo que logró reducir la condena que solicitaba la Fiscalía y que ascendía a tres años de cárcel. La condenada se aprovechó del delicado estado de salud de la mujer a la que cuidaba para retirar 760 euros en efectivo de su cuenta bancaria. También sustrajo joyas por valor de 1.277,13 euros (que no se han podido recuperar) y otras por valor de 336,87 euros que pudieron localizarse en una tienda de empeños de la avenida del Puerto de Valencia.