El agente de la Policía Nacional acusado de agredir violentamente a un árbitro menor de edad durante un partido de fútbol entre el Mislata Unión de Fútbol y Los Silos en el polideportivo de Burjassot en 2013 ha aceptado una pena de diez meses de prisión por un delito de lesiones. La víctima, que por entonces tenía 17 años y cursaba segundo de Bachillerato, sufrió la pérdida del bazo como consecuencia de la agresión.

Este es el preacuerdo al que llegaron ayer antes de la celebración del juicio en la Audiencia Provincial de Valencia. No obstante, la condición para que la pena que solicitaba el fiscal de cinco años y seis meses de cárcel se viera considerablemente reducida era que el acusado abonara la indemnización de la responsabilidad civil de 62.000 euros, y por cuestiones técnicas se tuvo que aplazar el acuerdo a hoy miércoles.

La agresión se produjo el 17 de febrero de 2013 durante el encuentro de Segunda Regional disputado en el campo de fútbol de Burjassot cuando el joven árbitro señaló una falta. Uno de los jugadores del Mislata Unión de Fútbol, miembro de la Policía Nacional, se encaró con él y comenzó a proferir insultos al colegiado. «Árbitro eres un subnormal, vete a cagar», espetó éste. Acto seguido el colegiado le mostró tarjeta roja y el acusado, molesto con la expulsión, le propinó de forma inesperada un puñetazo en el lado izquierdo de la cara. El árbitro cayó al suelo y su agresor siguió golpeándole, dándole dos patadas en el costado izquierdo y en la espalda.

Como consecuencia de la agresión el joven de 17 años sufrió una hemorragia interna que le provocó la pérdida del bazo, así como desviación del tabique nasal. El agente ha reconocido en todo momento su error y mostró su arrepentimiento por lo ocurrido. No obstante, el fiscal considera que los hechos son constitutivos de un delito de lesiones con alevosía.