Un hombre de 60 años se encuentra ingresado en estado grave en el Hospital Clínico de Valencia tras recibir una brutal paliza propinada presuntamente por su yerno. Al parecer, el sexagenario acudió al domicilio de su hija, junto a un hermano de ésta, tras recibir una llamada de su nieta mayor, alertándole de que su padre estaba pegándole a su mamá. El presunto maltratador ni siquiera les dejó subir a la casa. Bajó y una vez en la calle la emprendió a golpes dejándolos a ambos inconscientes en la calzada. «Cuando mi padre estaba en el suelo sangrando siguió pateándole la cabeza», relata la víctima de malos tratos e hija del agredido, quien sufre graves traumatismos craneoencefálicos. Tras una semana en la Unidad de Cuidados Intensivos el hombre sigue sin poder articular palabra.

El presunto agresor fue detenido esa misma madrugada por la Policía Nacional. Asimismo, el Juzgado de Instrucción número trece de Valencia ordenó su ingreso en prisión provisional acusado de un delito de lesiones graves o tentativa de homicidio, a la espera de la evolución de la víctima, según indicaron fuentes jurídicas. Además se celebró juicio rápido por el delito de violencia contra la mujer, donde el arrestado llegó a un acuerdo de conformidad tras reconocer que la había zarandeado y aceptó una pena de trabajos en beneficio de la comunidad y orden de alejamiento.

Nunca se atrevió a denunciarlo

Los hechos ocurrieron en la madrugada del pasado 19 de junio en un domicilio del distrito del Marítim de Valencia cuando el presunto agresor recriminó a su mujer haber llegado tarde a casa. Aunque no existen denuncias previas por malos tratos, la víctima asegura que no era la primera vez que le pegaba, pero que nunca se había atrevido a denunciarlo. «Mis hijas me decían que lo denunciara pero al final siempre conseguía calmarlo», confiesa con dolor viendo tendido en la cama del hospital a su padre por la violencia de su pareja y padre de sus cinco hijos, de entre siete y quince años.

Ese día fue su hija mayor la que cogió el teléfono y llamó a su abuelo contándole lo que pasaba. El hombre, de 60 años, llegó acompañado de su otro hijo y se enzarzó en una discusión con su yerno para proteger a su hija. «Yo no podía ayudarles, estaba pendiente de los niños. Primero dejó a mi hermano inconsciente y luego la tomó con mi padre, pegándole patadas en el suelo», relata la mujer.

El sexagenario tuvo que se trasladado en una ambulancia del SAMU al Hospital Clínico de Valencia, donde todavía, una semana después, permanece ingresado en estado grave. «Hoy abría un poco los ojos y parece que quiere hablar pero no se le entiende», explica con algo de esperanza su hija.

Por su parte, el presunto agresor fue arrestado y puesto a disposición judicial. El acusado negó los hechos y alegó que el hombre se golpeó la cabeza al caer al suelo porque iba borracho. No obstante, el juez acordó su ingreso en prisión provisional a tenor de los informes forenses que atestiguan que la víctima tenía golpes en varias partes del cráneo incompatibles con una caída.