Un guardia civil jubilado de 70 años se encuentra ingresado en estado grave en la Unidad de Quemados de La Fe, en Valencia, después de que un vecino le prendiera fuego a traición cuando paseaba tranquilamente a su perrita en una plaza de Algimia de Almonacid, el municipio del Alto Palancia donde residen ambos. El detenido y su víctima habían tenido numerosos enfrentamientos anteriores. De hecho, el presunto agresor tiene un juicio pendiente para el próximo mes de enero por golpear con un silla en la cabeza a esta misma persona en un bar de la localidad mientras veían un partido de fútbol. En aquella ocasión la víctima quedó inconsciente y tuvo que permanecer hospitalizado unos quince días tras la agresión.

Según fuentes vecinales, dos horas antes de causarle las quemaduras a este vecino el presunto agresor, de 39 años, ya protagonizó otro altercado en la parada del autobús con unas personas que estaban esperando en la misma para ir a Segorbe. Al parecer, éste habría intentado prender fuego a unos contenedores, apuntaron fuentes municipales.

No obstante, a las once de la mañana y sin que mediara discusión previa entre ellos, el ahora arrestado atacó a traición a su vecino rociándole de gasolina con una garrafa. En el forcejo ambos cayeron al suelo y una vez allí el agresor le prendió fuego con un mechero. Un pintor que se encontraba cerca acudió a socorrer al herido y sofocó las llamas con su propia camiseta. Fruto de los hechos, la víctima, de 70 años, sufrió quemaduras graves en el veinte por ciento del cuerpo, principalmente en cabeza, brazos y tórax.

Tras el ataque, el presunto agresor, peluquero de profesión, se dio a la fuga, hasta que poco más de dos horas después, fue detenido por la Guardia Civil en una zona forestal denominada La Nevera, en el término municipal de Alcúdia de Veo. En el operativo para tratar de localizarlo participó el helicóptero de la Benemérita. Según las fuentes consultadas por este periódico, el detenido había cogido previamente de su casa una escopeta, aunque en el momento de la detención fue encontrado supuestamente tratando de quitarse la vida con el monóxido del motor de su coche.

El arrestado, quien ha tenido problemas con varios vecinos del municipio, fue trasladado hasta los calabozos de Segorbe a la espera de ser puesto a disposición del juez acusado de un delito de homicidio en grado de tentativa. Testigos aseguran que antes de huir el agresor manifestó: «Lástima, me lo podía haber cargado».