Agentes de la Policía Nacional han desarticulado en las localidades valencianas de Alzira y Algemesí un grupo criminal dedicado al tráfico de cocaína y marihuana en la comarca de La Ribera, en una operación que ha permitido detener a cinco hombres y tres mujeres de 18 a 55 años, muchos de ellos familiares entre sí, según ha informado el instituto armado en un comunicado.

Las investigaciones se iniciaron en abril al tener conocimiento los policías de que en un domicilio de Algemesí se vendían estupefacientes. Tras las pesquisas, los agentes han confirmado que el grupo estaba formado por ocho personas y que algunas formaban parte de un clan familiar dedicado a distribuir cocaína y marihuana, así como a adquirir numerosos productos de procedencia ilícita, que se han intervenido y han sido devueltos a sus propietarios.

El grupo comerciaba con la droga en varias poblaciones de la comarca de La Ribera y tenía varios puntos muy activos, para lo que estaba "perfectamente estructurado", ya que cada uno de los integrantes tenía una función que desempeñaba en varios domicilios propiedad del mismo clan familiar, según las mismas fuentes.

En estos inmuebles los sospechosos disponían de lo mínimo para evitar la detención en caso de que entrara la Policía. Además, también utilizaban un establecimiento comercial para realizar la venta de la droga al menudeo.

La sustancia era transportada y almacenada en garajes por otros miembros del grupo, desde donde la surtían a los puntos de venta. De este trabajo se encargaba una persona ajena a la familia para así evitar que fueran relacionados, como han confirmado los agentes.

CASI UN KILO DE DROGA

Una vez confirmada la identidad de todos ellos, los policías realizaron ocho registros --cuatro en garajes, tres en domicilios y uno en la tienda que utilizaban-- en los que han intervenido un total de 560 gramos de cocaína y 250 gramos de marihuana junto a tres básculas digitales de precisión de cara a la venta de la droga.

En el interior de estos puntos también han requisado un total de 2.370 euros en metálico, un arma prohibida, un vehículo a motor, cuatro teléfonos móviles de alta gama y numeroso objetos de procedencia ilícita, como varias bicicletas, material electrónico y digital, menaje, bebidas alcohólicas y refrescos, entre otros.

Por todo ello, los ocho miembros del grupo han sido detenidos como presuntos autores de los delitos de pertenencia al grupo criminal y contra la salud pública, así como de receptación a dos de ellos. Los efectos presuntamente robados se han analizado para ser entregados a sus legítimos propietarios.

De los arrestados --cinco hombres y tres mujeres con edades comprendidas entre 18 y 55 años, siete de ellos con antecedentes policiales--, cuatro ingresaron en prisión y otros cuatro fueron puestos en libertad tras prestar declaración.