La Audiencia Provincial de Murcia ha condenado a Juan Cuenca, gerente del club de voleibol donde jugaba Ingrid Visser, y a Valentín Ion, ciudadano rumano al que contrató como sicario, a 34 años de prisión para cada uno como autores de dos delitos de asesinato pareja holandesa, cuyos cadáveres fueron descuartizados el 13 de mayo de 2013 en una casa rural de Molina de Segura. Además ambos condenados deberán indemnizar a la familia de las víctimas con 200.000 euros.

Por otra parte, el otro ciudadano rumano Constantin S., a quien el Jurado consideró que solo participó en el descuartizamiento y enterramiento de los cadáveres, ha sido condenado a la pena de prisión de cinco meses como responsable de un delito de encubrimiento. La sentencia contempla en los tres casos la atenuante muy cualificada de dilaciones indebidas.

El veredicto de culpabilidad del Jurado Popular declaró probado que Cuenca, detenido en Valencia junto a los otros dos condenados, planeó la muerte violenta de la pareja. Tanto él como Ion acabaron con la vida de Visser y Severin y el tercer acusado los encubrió.