Apenas ocho meses antes de que presuntamente matara a su actual pareja, Gloria Amparo Vásquez Bedoya, arrojándola por el hueco de la escalera de su finca de la calle Tres Cruces, José Luis G. G. fue detenido por amenazar de muerte y agredir a una mujer por el mero hecho de negarse a mantener relaciones sexuales con él. Sucedió en el domicilio de la víctima, a la que había conocido poco antes. La mujer quedó con él en su casa, pero rechazó mantener relaciones sexuales, a lo que el ahora acusado de asesinato reaccionó con una violencia desproporcionada, según declaró la mujer en la causa judicial abierta contra él y que generó una orden de alejamiento que aún está en vigor.

No sólo destrozó los muebles de varias estancias y tiró y rompió objetos en la habituación y el en el salón de la casa, incluyendo varios televisores, sino que además, la acorraló y la amenazó con una botella rota mientras le espetaba frases como «te voy a mandar unos colombianos y te voy a matar» o «te voy a abrir la cabeza». La mujer logró arrancarle la botella de las manos y encerrarse en la terraza, desde donde pidió ayuda, gracias a lo cual evitó que la agresión fuese a más. Un año antes, en marzo de 2015, José Luis G. G., ya había sido detenido por amenazar y agredir a la que entonces era su esposa, una mujer de origen colombiano como su última víctima, Gloria Amparo Vásquez.

Según declaró entonces la víctima ante el juez de Instrucción número 1 de Violencia sobre la Mujer de València, José Luis la maltrataba habitualmente en los seis años de relación que llevaban manteniendo en aquel momento, los tres últimos ya como matrimonio.

El día de su detención, el presunto maltratador trató de evitar que ella se fuera de casa -el mismo piso de la calle Tres Cruces donde supuestamente mató a Gloria este martes pasado- agarrándola del pelo y arrojándola de espaldas contra la pared mientras le gritaba: «¿Pero tú dónde crees que vas, sudaca de mierda?» o «¡Subnormal, que eres una subnormal!».

Cuando la policía acudió al domicilio, después de ser alertada por la víctima, lo encontró tranquilamente sentado en el sofá, viendo la tele. Y, como ahora, negó la evidencia y se limitó a decir que «simplemente hemos tenido una discusión».El juez decreta prisión sin fianza

El Juzgado de Violencia sobre la Mujer número 4 de Valencia, en funciones de guardia, ha decretado prisión provisional comunicada sin fianza para el acusado

El detenido, al que la jueza imputa un delito de homicidio, se ha acogido a su derecho a no declarar, ha informado el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana.

La investigación por la muerte de la mujer fue asumida inicialmente por el Juzgado de Instrucción número 18 de Valencia, que se encontraba de guardia el día del crimen.

El instructor ha decidido remitir la causa a un Juzgado especializado en Violencia sobre la Mujer, después de que las primeras diligencias practicadas permitan concluir que existía una relación sentimental entre la víctima y el sospecho.

A este respecto, Instrucción 18 concluye que el "vínculo afectivo" existente entre ambos "excede de la mera amistad", según se desprende del testimonio prestado por algunos familiares de la fallecida, que aseguran que fueron pareja durante tres meses y que la relación acabó hace 7 u 8 meses.

El juez acuerda inhibirse y, paralelamente, pide que otro Juzgado abra otra causa por las sustancias estupefacientes que fueron halladas por la Policía durante el registro de la vivienda acordado por el magistrado para investigar el crimen.