La Policía Nacional ha reconstruido dos veces en 48 horas el asalto al céntrico piso de Elda en el que un niño de ocho años murió en extrañas circunstancias, en un intento por arrojar luz sobre los puntos menos claros de la declaración de la madrastra de acogida y única testigo de la supuesta agresión, que está embarazada de 4 meses.

Además, los investigadores del grupo de Homicidios de Alicante volvieron a tomar declaración al padre de acogida del menor y a su novia, la mujer que estaba con el niño el día de los hechos. Según su relato, dos hombres vestidos de negro, ataviados con cascos de motoristas, la abordaron a golpes en el rellano del edificio y luego la golpearon y abusaron de ella, tras lo que se desmayó, y al despertar encontró al niño muerto y semidesnudo.