Los asesinos de Miguel Veses, conocido en Llíria como "El Pelaílla", se sientan mañana ante la Audiencia de València para responder por su crimen y por la oleada de robos que perpetraron entre finales de 2014 y principios de 2015 en Llíria, Almassora y Castelló. En uno de estos asaltos los delincuentes maniataron y golpearon a su víctima, de 56 años, hasta dejarlo semiinconsciente. Posteriormente, tras torturarlo para que les dijera dónde guardaba el dinero, lo asfixiaron hasta matarlo. El Ministerio Fiscal solicita para los seis acusados, cinco hombres y una mujer, penas que suman los 202 años de cárcel por los delitos de asesinato, robo con violencia en casa habitada, lesiones con instrumento peligroso, receptación y contra la salud pública.

El crimen se produjo en la madrugada del 22 de enero de 2015 en la urbanización San Miguel de Llíria cuando cuatro de los acusados irrumpieron en el chalé de "El Pelaílla" con el rostro oculto con pasamontañas y armados con una pistola simulada, un cuchillo, una pata de cabra y otro objeto metálico alargado con el que le golpearon. Un quinto miembro de la banda se quedó dando vueltas en el vehículo haciendo labores de vigilancia.

Los delincuentes sorprendieron a su víctima mientras éste dormía, según la Fiscalía, y no le dieron posibilidad alguna de defensa. De ahí, que los hechos hayan sido calificados de asesinato y no de homicidio, al apreciarse la circunstancia de alevosía.

No fue hasta la mañana siguiente cuando el hijo del Miguel Veses encontró a su padre maniatado y sin vidael hijo del Miguel Veses encontró a su padre maniatado y sin vida al ver que no llegaba al almuerzo al que habían quedado con unos amigos. Además, esa misma mañana había sido localizado su vehículo en una localidad de Castelló. Sus propios asesinos habían huido en él para deshacerse del coche, aunque fue esta la primera pista que llevó a la Guardia Civil hasta los sospechosos.

Los acusados se apoderaron en dicho robo de un televisor, un equipo de música, dos teléfonos móviles, el coche de su víctima, una cadena de oro, una pequeña cantidad de cocaína y dinero en efectivo. El fiscal solicita que los seis acusados indemnicen solidariamente al hijo del fallecido con 100.000 euros por su muerte, más los intereses legales correspondientes.

Oleada de robos

Además de este asesinato, en el que el objetivo de los acusados era claramente robar a su víctima, la Guardia Civil les atribuye catorce robos más en chalés y alquerías, cometidos entre septiembre de 2014 y febrero de 2015, en las localidades de Almassora, Castelló, Llíria y Pedralba. En este último municipio los atracadores, que iban encapuchados, asaltaron el 3 de enero de 2015 a un matrimonio en su domicilio para apoderarse de dinero, joyas, ordenadores y otros aparatos electrónicos. Incluso golpearon en la cabeza con un arma de fuego simulada a la mujer, causándole lesiones. Por dicho delito también tendrán que responder ante la Sección Tercera de la Audiencia Provincial de València.

La Fiscalía solicita penas que van desde los cuarenta años de prisión para uno de ellos, 37 años para otros tres, 27 para un quinto y 24 para la única mujer procesada, quien también colaboró con éstos a la hora de deshacerse del vehículo del fallecido. Para un séptimo detenido se ha sobreseído la acusación contra él.