La Sala de lo Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV) ha confirmado la condena de 25 años de prisión impuesta a un hombre que mató a su pareja a golpes con una piedra en la cabeza y en la cara en diciembre de 2015 en Villena. La sentencia, hecha pública ayer por el TSJCV, confirma otra anterior dictada por la sección primera de la Audiencia de Alicante en junio de este año. En ella, aunque le absolvió de dos delitos de malos tratos, el tribunal declaró a Juan Carlos H.E. culpable de asesinato con la agravante de parentesco y, además de la pena de prisión, le condenó a indemnizar a la familia de la víctima con más de 400.000 euros. El condenado pedía la revocación de la condena por entender que el delito era un homicidio y no un asesinato pero el alto tribunal considera que existió «alevosía».

Los hechos se remontan al verano de 2015, cuando el condenado y su excompañera sentimental reiniciaron su relación, fruto de la cual habían tenido un hijo quince años antes. La pareja reanudó la convivencia pero las discusiones comenzaron a ser frecuentes.

Según la Audiencia de Alicante, la víctima, entonces de 39 años y madre de otro menor de edad tenido con otra pareja, se hartó de vivir «en un continuo estado de tensión y hostilidad», rompió con su compañero y le echó de casa. El ahora condenado insistió en seguir con ella y la convenció para ir a cenar juntos la noche del 22 de diciembre de 2015 a un restaurante de la localidad. Durante la cena, el condenado y la mujer volvieron a enzarzarse en una riña, por lo que se marcharon del lugar en el vehículo de ella.

La mujer condujo unos kilómetros por la autovía A-31 y se desvió en un momento dado por una vía de servicio, a la altura de la partida El Morrón. Allí detuvo el coche porque su compañero estaba «cada vez más alterado y violento». Fue en este paraje donde Juan Carlos H.E. se abalanzó sobre la víctima y la mató de varios golpes en la cabeza y en la cara. Tras volver a casa, ducharse y cambiarse, regresó para esconder el cadáver en una caseta semiderruida cercana.