Un indigente de 60 años murió en la madrugada de ayer mientras dormía en plena calle, aunque de momento los forenses no han podido determinar si la bajada de las temperaturas ha sido el detonante del fallecimiento. Fue precisamente otro sintecho que dormía a su lado quien dio la alarma pasadas las tres y media de la madrugada, cuando se despertó y se dio cuenta de que su compañero no respondía.

El hombre salió corriendo al retén de Centro de la Policía Local, muy cerca de donde estaban pernoctando y pidió ayuda urgente. Gracias a ello los agentes activaron el protocolo de Sanidad y solicitaron una ambulancia, al tiempo que enviaban una patrulla al punto donde estaban durmiendo, en la calle Historiador Beuter, junto a la plaza de Vicent Iborra.

El médico comprobó que el indigente, de nombre Eusebio, estaba muerto, así que la policía alertó al juzgado y al forense de guardia. El cuerpo, que no presentaba señales de violencia, fue levantado cerca de las cuatro y media de la madrugada y trasladado al Instituto de Medicina Legal de València para practicarle la autopsia.

Eusebio era un habitual de la zona del Carme donde falleció, en la plaza Vicente Iborra y el entorno de la iglesia Nuestra Señora del Puig. También era un viej0 conocido de Servicios Sociales, ya que esta persona vivía en la calle desde hacía más de 20 años y siempre rechazó ayuda para refugiarse en un albergue o en alguno de los centros de baja exigencia del Ayuntamiento. «Lo máximo que aceptaba eran mantas para pasar el invierno, pero nunca aceptó otro tipo de asistencia, pese a los numerosos recursos de que disponemos para este tipo de personas», explicaron fuentes de la concejalía de Bienestar Social.