Ana Julia Quezada, la autora confesa del asesinato de Gabriel Cruz, había confeccionado en su ordenador un muñeco de vudú con la cara del niño. Además, buscó en Internet información sobre plantas venenosas, presuntamente con la intención de envenenar al pequeño de Níjar (Almería), según informa Antena 3.

Durante la búsqueda del niño, los investigadores le reclamaron el ordenador. Pero Ana Julia borró el historial de búsqueda, así como el material relacionado con vudú. Esto lleva a pensar que planeaba desde hacía tiempo el asesintato de Gabriel.

Los agentes también le solicitaron el móvil y ella les comentó que lo había perdido. De hecho, utilizaba el de su pareja, el padre de Gabriel.

Ahora, el titular del Juzgado de Instrucción 5 de Almería, el magistrado Rafael Soriano, ha librado oficio a la Guardia Civil para que informe del coste total del dispositivo de búsqueda que se activó y mantuvo durante 13 días en Las Hortichuelas (Níjar, Almería) tras la desaparición de Gabriel Cruz con el objetivo de sumar la cuantía a la cifra que se establezca como responsabilidad civil en la causa penal que se sigue contra la presunta autora de la muerte.

Fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) han confirmado a Europa Press que el oficio se ha remitido a la Unidad Central Operativa (UCO) y se enmarca dentro de las diligencias de prueba que está acordando el juez instructor para el esclarecimiento de las circunstancias en que se produjo el crimen.

El operativo de búsqueda movilizó a 1.500 profesionales de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, así como de las unidades de emergencias y a 2.600 voluntarios en el rastreo de Las Hortichuelas, Las Negras, Rodalquilar y otros puntos del entorno del parque natural Cabo de Gata-Níjar, tal y como ha adelantado en su edición de este lunes el diario 'La Voz de Almería'. En concreto, las labores giraron en torno a 40 zonas y se extendieron a unos 400 puntos "especiales" como balsas y pozos.

Las mismas fuentes han indicado que han solicitado personarse como acusación popular en las diligencias previas por los presuntos delitos de asesinato, detención ilegal y contra la integridad moral el colectivo 'Clara Campoamor' y la Asociación Andaluza de Estudios Penales si bien el magistrado Rafael Soriano aún no las ha admitido y las está estudiando.