El autor confeso de las muertes de sus tíos y sobrinos en agosto de 2016, Patrick Nogueira, ha asegurado que emprendió el ataque que acabó con la vida de su tía Janaina después de sufrir un mordisco por su parte; y que horas después, cuando su tío llegó a la vivienda de Pioz donde ocurrieron los hechos, éste se le abalanzó y comenzó un forcejeo que acabó con ambos en el suelo y la navaja que portaba el acusado apuñalando a su familiar.

Así se desprende de su testimonio a preguntas de su abogada en la primera sesión del juicio por el que se le pide prisión permanente revisable y que se celebra en la Audiencia Provincial de Guadalajara.

Sobre la relación previa con sus tíos, ha revelado que sus padres pagaban un dinero por acogerle en España, abonando cantidades desde 500 hasta los 1.500 euros, pese a lo cual su tío le seguía exigiendo dinero.

Según ha dicho, llegó a ser amenazado por parte de su tío Marcos. "Me robó dinero de la cartera. Y me pidió 6.000 euros y me dijo que si no me denunciaría a Extranjería", ha argumentado, recordando cómo tras esa discusión le anunciaron que se mudarían desde Torrejón de Ardoz, sin revelar la dirección de destino. "Me dijeron que se irían a Toledo".

Fue entonces cuando un día, al regresar al domicilio que compartía con su familia en Torrejón de Ardoz, encontró la vivienda vacía. "Me enfadé. Estuve dos meses sin contacto con ellos", ha manifestado, indicando que cuando sus tíos y sobrinos abandonaron Torrejón, dejaron además varias deudas en concepto de alquiler de la anterior casa de las que el entorno familiar le hizo responsable, y eso le hizo sentir "un tonto de mierda".

Tras esta mudanza, siempre según su relato, sus tíos se dirigieron a la familia de Nogueira en Brasil para trasladarles su mal comportamiento. "Dijeron a mi familia que tomaba drogas".

Dice que su tía le mordió

Sobre los hechos acaecidos en agosto de 2016, cuando tuvieron lugar las muertes, ha rememorado que, cuando se dirigía a Pioz, sabía que "algo iba a pasar", pero no sabía cómo. Incluso ha hecho un paralelismo con una agresión perpetrada por él mismo cuando tenía 16 años a un profesor para argumentar su daño cerebral.

Tras llegar con dos pizzas a la vivienda, su tía estaba fregando los platos mientras él le ayudaba. "Estábamos cara a cara. Mientras ella fregaba los platos, yo los secaba. Me miraba a la cara. Ella me mordió la mano, yo le clavé en el cuello", ha afirmado.

Cuando llegó Marcos, marido de la víctima y tío del acusado, Nogueira ha relatado que se abalanzó contra él y tras un forcejeó en el que intentaba quitarle la navaja que portaba, ambos cayeron al suelo. "Cuando caímos al suelo se le clavó la navaja", ha apuntado.

Fue a Brasil a despedirse de su familia

Acerca de su viaje a Brasil tras cometer los hechos, ha negado que se tratara de una huida, ya que la intención era ir a despedirse de su familia al ser consciente de "la mierda" que se le iba a venir encima.

Cuando empezó a trascender en los medios de comunicación brasileños los hechos ocurridos en Pioz, tomó la decisión de regresar a España para "resolverlo todo cuanto antes".

Entre tanto, ha lamentado que su familia ha recibido amenazas, ha tenido que cambiar de ciudad y ha "sufrido mucho".

Sufrió acoso y alcoholismo

El acusado ha repasado su vida y se ha escudado en que fue un niño acusado en el colegio. "Me insultaban, me pegaban y me escupían", ha asegurado, argumentando que toda esa carga la sufría en soledad ya que nunca llegó a hablarlo con nadie.

Tuvo que cambiar de colegio hasta en cinco ocasiones, y ha asegurado que al inicio de su adolescencia tuvo un "traumatismo craneoencefálico" debido a un fuerte golpe.

Ha esgrimido problemas con el alcohol, su "único amigo" desde los 10 años. "No se cómo es aquí la juventud, en mi país es así. A partir de los 15 años me pasó factura. Bebía de todas las maneras para desahogarme", ha asegurado.

Tras enumerar los problemas derivados del alcohol, ha insistido en que bebía hasta emborracharse, al principio "una botella a la semana" hasta llegar a "una botella por noche".

El abuso del alcohol, según su testimonio, le ha llevado a "ver sombras" que en todo caso no alteran su "visión de la realidad". "Pierdo la paciencia muy rápido y tengo que volver a beber".

El ministerio fiscal alega contradicciones

La fiscal Rocío Rojo ha recordado partes de la declaración inicial de Nogueira en las que aseguraba durante la instrucción que su tío no se había defendido, por lo que Nogueira ha incurrido en una contradicción en su testimonio.

Ha dicho además que en esas primeras declaraciones contaba cómo había descuartizado a sus tíos y hablaba de los mensajes intercambiados con su amigo Marvin en los que relataba los hechos, algo que este miércoles "ha omitido".

Al respecto de los argumentos sobre sus problemas en la infancia o la supuesta amenaza de su tío de denunciarle por su situación ilegal en España si no le daba dinero, ha puesto de manifiesto que es "la primera vez" que mencionaba estos extremos. "Es la primera vez que oímos que su tía le da un mordisco", ha añadido Rojo.

Las acusaciones particulares también han coincidido en apuntar a las "numerosas contradicciones", algo que ha negado la abogada de la defensa. Incluso la representante del Ministerio Fiscal ha pedido que se tengan en cuenta las grabaciones de sus testimonios iniciales durante la instrucción, algo que ha intentado evitar la abogada defensora.

Tras su declaración, se ha procedido al visionado a puerta cerrada de las imágenes compartidas por mensajería instantánea con su amigo Marvin, residente en Brasil. Tras el mismo, se ha suspendido la sesión, que se reanudará este jueves a las 9.00 horas.