El juez de Instrucción 20 de València ha ordenado el ingreso en prisión de un hombre de 30 años por violar en repetidas ocasiones a una chica de 21 años a la que había conocido en una discoteca de València el día de Año Nuevo. El forense ha determinado que es probablemente una agresión sexual con sumisión química, es decir, que el ahora encarcelado utilizó algún tipo de sustancia para anular la voluntad de la joven, aunque no ha podido ser rastreada por los médicos que la atendieron porque la chica, asustada, tardó días en denunciar. Aún así, la Policía cuenta no solo con el testimonio de la víctima, que fue consciente de la violación al despertarse en su casa con el agresor sobre ella en el momento en que la agredía, sino también con una amiga de la chica y otros testigos que la vieron completamente anulada en esas horas.