Un hombre de 34 años de edad murió anoche en plena calle, en el barrio del Cabanyal-Canyamelar, tras recibir al menos ocho cuchilladas en el pecho y en el cuello que supuestamente le propinó un vecino del barrio que fue inmediatamente detenido por agentes de la Policía Nacional de València. Según ha podido saber Levante-EMV, el origen del homicidio, del que ha informado este diario en exclusiva, tiene su origen en una deuda de 15 euros y en unas supuestas amenazas de la víctima al autor.
El supuesto agresor se presentó en compañía de su pareja en la comisaría del Marítim, a escasos metros del lugar del crimen, para informar de lo sucedido y posteriormente colaborar en el hallazgo del arma blanca.
El homicidio se produjo pasadas las diez de la noche durante una discusión entre ambos hombres, en las inmediaciones del negocio familiar del detenido, ubicado en la calle de l'Omet, a escasos metros de la comisaría del Marítim del Cuerpo Nacional de Policía.
El arrestado aseguró que el ataque se produjo en defensa propia. Según su primera versión de los hechos, la víctima le habría amenazado inicialmente con el cuchillo por razones que no explicó. El detenido aseguró, además, que cuando estaba siendo amenazado mantuvo un forcejeo con su supuesto asaltante durante el cual le habría arrebatado el arma blanca y se la habría clavado. Sin embargo, esa versión era objeto de investigación por el grupo de Homicidios de la Policía Nacional, ya que no explicó cómo pudo clavarle hasta en ocho ocasiones el cuchillo durante el forcejeo.
Nada más producirse la agresión, varias personas alertaron al 112, que envió al lugar patrullas de la Policía Local y de la Policía Nacional. Fue precisamente una dotación de este último cuerpo quien arrestó al supuesto autor de la agresión mortal, quien se había refugiado en el interior de un quiosco. El detenido, que no opuso resistencia, relató su versión de los hechos y finalmente accedió a entregar el arma homicida, un cuchillo de cocina que pudo ser recuperado en el interior de un quiosco de la calle l'Omet. Mientras, otros agentes permanecieron al lado del herido, identificado como Alberto G. E., de 34 años, a la espera de la llegada de la ambulancia del SAMU. El equipo sanitario apenas pudo intervenir, dado que las gravísimas lesiones le provocaron la muerte en pocos minutos. Además de numerosas cuchilladas en el pecho, varias de ellas letales, recibió dos más en el cuello, una de ellas mortales de necesidad.
En cuanto el médico del SAMU certificó su muerte la policía alertó al juzgado de guardia, que se desplazó al lugar junto con el forense para examinar el cuerpo, que fue trasladado al Instituto de Medicina Legal de València. La autopsia que se le practicará esta mañana servirá para determinar con exactitud cuántas cuchilladas recibió realmente.
Agentes del grupo de Homicidios desplazados al lugar interrogaron a los testigos para tratar de aclarar cómo se desencadenaron los hechos que han terminado con la vida de Alberto G. E. El detenido, de 25 años, Mauricio G. P., permanecía anoche en los calabozos del complejo policial de Zapadores, adonde fue conducido por los agentes que le detuvieron.
La Policía Científica realizaba al cierre de esta edición la inspección ocular del lugar donde se produjo el apuñalamiento y se hizo cargo del arma homicida para analizarla en busca de evidencias.
