Una niña de cinco años falleció el pasado lunes en Mérida tras atragantarse mientras comía frutos secos tal y como informa la cadena COPE en su página web. Al parecer un grano de maíz quedó atrapado de forma accidental en las vías respiratorias de la pequeña impidiendo el paso del aire a los pulmones. Los pediatras insisten en lo peligroso que puede ser que los niños coman este tipo de alimentos.

En Gijón un niño de 10 años tuvo que ser atendido hace apenas unos días en los cines de La Calzada al atragantarse mientras comía una bolsa de palomitas. En este caso el menor fue atendido por los servicios médicos y derivados al Hospital de Cabueñes.

No sólo las palominas son peligrosas. También algunas frutas. En el mes de enero perdía la vida un niño de Gijón atragantado con una uva.