La Guardia Civil investiga a dos hombres por un presunto delito contra el patrimonio histórico y otro de receptación, tras intervenir cinco ánforas romanas, dos anclas con concreciones marinas, una piedra tallada, seis piezas de plomo coraleras y partes de barcos naufragados, todo ello «de gran valor arqueológico», según destacaron fuentes del instituto armado.

La «Operación Arofna» se inició el pasado mes de octubre, después de que agentes del Seprona de la Guardia Civil detectaran en las redes sociales la venta de una ánfora romana, supuestamente auténtica y de dudosa procedencia, según informó ayer la Guardia Civil.

La investigación, llevada a cabo en colaboración con el equipo del Seprona de Girona, llevó a la identificación del comprador, en Pals (Girona), y del vendedor, vecino de Alfafar. Asimismo los agentes llevaron a cabo el registro de sus respectivos domicilios, donde se les incautaron varias ánforas romanas y diverso material considerado patrimonio histórico.

La Guardia Civil investiga a los dos hombres, de 40 y 53 años de edad y de nacionalidad española, por su implicación en un presunto delito contra el Patrimonio Histórico y otro de receptación.

En la operación, los agentes hn recuperado cinco ánforas romanas, dos anclas con concreciones marinas, una piedra tallada, seis piezas de plomo y restos de cerámica, que han sido depositados en el Centro de Arqueología Subacuática de la Generalitat catalana.

Las diligencias han sido entregadas al Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número cuatro de Catarroja, encargado del caso, al haberse producido el delito en Alfafar.