La juez de la Vila Joiosa que investiga la presunta agresión sexual múltiple de la conocida como Manada de Callosa d'en Sarrià ha acordado esta semana que se proceda al volcado completo del contenido del teléfono móvil de uno de los cuatro investigados y ha autorizado a la Guardia Civil a que utilice «técnicas invasivas» que pudiera hacerlo «irrecuperable» para la extracción de la información. La medida pretende descubrir la posible existencia de un segundo vídeo de la agresión sexual a una joven de 19 años el pasado día de Año Nuevo en una vivienda de Callosa.

La autorización de la titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 4 de la Vila se realiza a petición del Laboratorio de Criminalística de la Guardia Civil de València, cuyos especialistas no han podido obtener la información con el hardware y software que disponen en la Comunitat Valenciana. Por ello, el teléfono móvil será remitido al Departamento de Ingeniería-Área de Electrónica del Servicio de Criminalística de la Dirección General de la Guardia Civil en Madrid, donde los especialistas confían en acceder a toda la información mediante «el uso de técnicas avanzadas para la extracción», aunque se pueden destruir datos en el intento.

Fue grabado mientras grababa

La resolución judicial no concreta los problemas que han tenido los especialistas para obtener la información, pero sí explica que la petición de la Guardia Civil obedece a que en el vídeo de la agresión sexual intervenido a uno de los arrestados el día de los hechos se puede ver que hay otra persona grabando con un móvil y el modelo, de la marca Samsung, coincide con el de uno de los cuatro encarcelados desde principios de año, en concreto, el del joven de 19 años que está ingresado en la cárcel de Villena. Por ello, la juez autoriza a la Guardia Civil el uso de las «técnicas invasivas» para extraer los datos ante la sospecha de que existan más vídeos de la agresión sexual u otros datos de interés para la investigación.

La práctica de esta nueva diligencia ha coincidido casi en el tiempo con la personación en la causa de la Asociación Clara Campoamor, colectivo feminista que ejercerá la acción popular contra los cuatro jóvenes encarcelados tras su detención el pasado mes de enero.

Una vez se lleve a cabo el volcado completo del teléfono móvil en el laboratorio central del instituto armado, el juzgado ha ordenado que su contenido sea estudiado por los agentes del equipo de Policía Judicial de la Vila Joiosa, que han llevado la investigación desde su inicio.

Los cuatro jóvenes acusados de la violación grupal siguen en prisión preventiva en las cárceles de Fontcalent y Villena.