La autopsia ha revelado que el bebé cuyo cadáver fue encontrado en un contenedor de basuras en Alicante nació con vida y no presentaba signos de violencia, según confirmaron ayer a este diario fuentes cercanas a la investigación. La Policía seguía ayer con las pesquisas para tratar de determinar la identidad de la madre y las circunstancias en las que se produjo la muerte del pequeño y a la hora de cierre de esta edición todavía no se había practicado detención alguna.

Los hechos ocurrieron el lunes por la tarde cuando un chatarrero se encontró el cuerpo del recién nacido entre las bolsas en un contenedor de basuras en la calle General Elizaicin, según algunas fuentes, aún con el cordón umbilical.

El suceso obligó a acordonar la calle durante más de dos horas mientras la comisión judicial procedía al levantamiento del cadáver y la Policía examinaba la zona a la busca de pistas que le permitieran identificar a la madre del recién nacido.

Las fuentes consultadas por este diario indicaron que la autopsia ha revelado que el pequeño nació en perfecto estado de salud. El cuerpo del pequeño tenía aire en los pulmones, lo que evidencia que llegó a vivir tras el alumbramiento.

Los forenses no han encontrado signos de violencia alguno en el bebé, motivo por el que la Policía está investigando si éste fue arrojado aún con vida al interior del contenedor. Los forenses del Instituto de Medicina Legal de Alicante apuntan también a que el pequeño apenas tenía unas horas de vida.

Por el momento, la Policía prosigue con las investigaciones para tratar de identificar a la madre del pequeño y ayer a la hora de cierre de esta edición todavía no se había practicado ninguna detención en relación con el cadáver.

Los investigadores ya han alertado a hospitales y centros de salud para que se pongan en contacto con ellos en caso de atender a alguna mujer con evidencias de haber tenido un parto reciente o bien de haber sufrido alguna hemorragia.

También se están abriendo otras líneas de investigación, entre las que se encuentra el análisis del material encontrado junto al cadáver. Aunque sin embargo, por el momento no hay pistas determinantes que hayan puesto a los agentes en el camino para poder identificar a los padres del pequeño.

El suceso ha dejado conmocionado a los vecinos de la barriada del Pla en Alicante que vieron sobresaltados el amplio despliegue policial que obligó a acordonar calles hasta que se produjo el levantamiento del cadáver.

Algunos de los vecinos que estaban en las viviendas más próximas al lugar donde se encontraba el cuerpo no pudieron pasar hasta que no se marchó la comisión judicial y tuvieron que esperar en la calle hasta que la Policía les dejó pasar.