La magistrada titular del Juzgado de Menores número 2 de Alicante ha dictado una sentencia condenatoria en el caso de la niña de 14 años que denunció haber sido violada por tres compañeros de instituto en la Marina Alta en julio de 2018, aunque ha rebajado sensiblemente las penas de internamiento solicitadas por la Fiscalía y la acusación particular. Así, el fallo recoge una condena para el cabecilla de la agresión sexual de tres años de internamiento, frente a los cinco años solicitados por las dos acusaciones. A los otros dos menores condenados por participar en la violación les imponen sendas penas de dos años y seis meses de internamiento, uno menos que lo solicitado por la Fiscalía y la mitad que la condena pedida por la acusación particular, ejercida por la letrada Mónica Mas Franqueza.

El cuarto menor condenado, que grabó a sus amigos mientras violaban a la niña y se le considera cooperador necesario de la agresión sexual, deberá cumplir dos años de internamiento, uno menos que lo solicitado por el Ministerio Público y tres años menos que el castigo reclamado por la acusación ejercida por la familia de la víctima.

Además de rebajar las penas de internamiento, el fallo también contempla una indemnización de 12.000 euros por los daños psicológicos causados a la menor, una cifra sensiblemente inferior a los 100.000 euros reclamados por la acusación particular. La joven ha sufrido crisis de ansiedad, pérdida de peso y necesita terapia psicológica para superar el trauma, según los informes periciales.

Una vez cumplan la pena de internamiento la sentencia recoge igualmente dos años de libertad vigilada, así como una orden de alejamiento de la víctima y prohibición de comunicarse con ella durante todo el periodo de la condena.

La juez de Menores considera a los cuatro acusados culpables de los hechos denunciados por la niña, quien además de ser violada por tres de ellos fue amenazada por los implicados al exigirle dinero a cambio de no difundir el vídeo de la agresión sexual entre los estudiantes del instituto.

Una vez se ha notificado la sentencia, desde la acusación particular ejercida por la familia de la víctima se plantean recurrir el fallo.