Un hombre de 54 años y nacionalidad lituana acumula ya dos detenciones y cuatro sanciones administrativas por incumplir el Decreto de Estado de Alarma desde que comenzó el confinamiento. La última de las detenciones se produjo en una rotonda de Picanya el pasado domingo por la noche cuando agentes de la Policía Local de Paiporta lo pararon cuando circulaba ebrio al volante de un BMW. Tras realizarle la pertinente prueba de alcoholemia, el conductor dio una tasa de 1,22 mg/l, cinco veces superior a la permitida.
El detenido por un delito contra la seguridad vial y por desobediencia tras negarse a una segunda prueba, ya había sido arrestado el pasado 25 de marzo por quebrantamiento y desobediencia grave, además de haber sido sancionado hasta cuatro veces por incumplir el confinamiento. En dos de estas ocasiones fue sorprendido bañándose en la playa del Saler.
Acababa de salir de prisión
Este ciudadano reincidente, al que poco parece importarle el Estado de Alarma, salió el pasado 10 de marzo de prisión tras cumplir una condena de cuatro meses por un delito de quebrantamiento de la orden de alejamiento de su pareja, interpuesta por un juzgado de violencia sobre la mujer.
Desde entonces y tras acordarse el Real Decreto del 14 de marzo por el que se acordaba el Estado de Alarma, esta misma persona ha sido detenido en dos ocasiones y sancionado hasta otra cuatro veces más por incumplir las restricciones de movilidad.
Agentes de la Policía Local de Paiporta y de la Guardia Civil lo arrestaron por última vez el pasado domingo cuando iba conduciendo visiblemente ebrio. Tras darle el alto a la altura de la rotonda de los Vientos de Picanya, que limita con el término de Paiporta, los agentes comprobaron que el conductor, de nacionalidad lituana, quintuplicaba la tasa de alcohol permitida.
Además de imputarle un delito contra la seguridad vial por circular ebrio, se le imputó también un delito de desobediencia ya que se negó a someterse a una segunda prueba de alcoholemia. De igual modo se tramitó una denuncia administrativa por el incumplimiento del Real Decreto de Estado de Alarma.
El detenido fue puesto a disposición del Juzgado de Instrucción número tres de Torrent, quien le retiró el permiso de conducir y el vehículo - que permanece en dependencias de la Policía Local de Picanya- y le advirtió que en caso de reincidir de nuevo se enfrentaría a una pena de prisión por desobediencia grave a la autoridad.
Hasta el pasado jueves, las fuerzas y cuerpos de seguridad habían interpuesto un total de 37.430 denuncias y procedido a la detención de 354 personas en la Comunitat Valenciana por incumplir el estado de alarma.
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