La banda de los cajeros automáticos reventados con explosivos ha vuelto a actuar. Apenas diez días después de que hicieran volar por los aires un cajero en una sucursal de Santa Pola, la misma banda ha reaparecido, esta vez en la Marina Alta, para hacer explosionar otro cajero del que se han llevado un botín que, según el arqueo inicial de la entidad afectada, el Banco Sabadell-Solbank, se sitúa en unos 15.000 euros. Los asaltantes se llevaron enteros los cajetines que contenían los billetes de 50 y de 100 euros. El resto lo tuvieron que abandonar porque, al parecer, colocaron mayor carga explosiva de la necesaria y causaron graves daños en la máquina que les impidió llevarse el resto de cajas con los billetes más pequeños.

El asalto se produjo sobre las 3.30 horas, una hora antes que el de Santa Pola. La explosión fue tan fuerte que destrozó buena parte de la oficina. Los cristales saltaron «como proyectiles» contra el edificio situado enfrente, explicaron fuentes conocedoras de los hechos. De hecho, la calle principal de Els Poblets, un pequeño municipio situado a pocos kilómetros de Dénia, permaneció cortada al tráfico buena parte de la mañana por el gran estropicio causado, que diseminó restos del cajero y de la propia fachada de la sucursal desperdigados por la calzada y la acera, dejando una apariencia de escenario de guerra.

Agentes de la Policía Judicial Guardia Civil revisaron de inmediato las grabaciones de las cámaras de seguridad, en las que se observa a varias personas que, con el rostro tapado con mascarillas, parece acercarse al cajero con la intención de sacar dinero. Sin embargo, lo que hacen es colocar el explosivo. Instantes después, el cajero salta por los aires y los ladrones se llevan los cajetines del cajero. Un asalto exprés. En pocos minutos, huyeron sin dejar rastro.

Con este son ya tres los asaltos a cajeros con explosivos registrados en la C. Valenciana en cinco meses. En febrero, un grupo de delincuentes reventó una máquina expendedora de dinero de una sucrusal de Torrent, a escasos metros de la parada de metro Torrent-Avinguda, y en pocos minutos huyeron con el dinero.

El más reciente ocurrió a las 4.30 horas del pasado 20 de julio en el cajero de una sucursal bancaria del centro comercial Gran Alacant, en Santa Pola, de donde escaparon con una pequeña cantidad de dinero.