Sin tregua contra los pederastas en la red. La Policía de Elx ha detenido en una localidad valenciana a un joven de 22 años que pidió a través de una red social a dos menores ilicitanas, una de ellas de siete años, que le enviaran imágenes de ellas desnudas. La madre de la más pequeña de las víctimas denunció los hechos sin que ninguna de las niñas llegara a enviar imagen alguna y en el registro en el domicilio del presunto pedófilo se encontró abundante material de pornografía infantil y otras fotografías con menores enseñando sus partes íntimas, motivo por el que están buscando si hay otros perjudicados.

Al detenido, vecino de la localidad valenciana de la Pobla del Duc, se le imputa un delito contra la indemnidad sexual de menores de edad. La investigación se puso en marcha por agentes adscritos a la Policía Judicial de la Comisaría de Elx cuando recibieron la denuncia de que dos niñas de siete y 17 años de edad, al parecer familiares, habían recibido un mensaje a través de las redes sociales de un individuo que les solicitaba que le enviaran imágenes de sus partes íntimas a cambio de una suma de dinero.

El presunto pederasta había contactado con ellas a través de una red social y se había hecho pasar por otro menor como ellas. El joven les insistía para que les dejara contactar con ellas por videollamada y que le enseñaran sus cuerpos desnudos.

Las dos jóvenes alertaron a sus padres del contenido del mensaje y fue la madre de la más pequeña la que se presentó en comisaría para interponer una denuncia. La investigación se puso en marcha para tratar de identificar al presunto autor de estos mensajes de contenido sexual. Las pesquisas les llevaron hasta una vivienda de la Pobla del Duc.

Los funcionarios se trasladaron hasta el domicilio donde procedieron a la detención del hombre y al registro del mismo. Dentro de la vivienda se intervinieron varios dispositivos en los que éste almacenaba abundante material de pornografía infantil. Vídeos e imágenes con menores de naturaleza sexual. En algunas de las imágenes intervenidas también aparecían mayores de edad que podrían no tener conocimiento de que estaban siendo grabados.