El ciudadano irlandés acusado de asesinar a golpes a un compatriota por celos en septiembre de 2018 en Torrevieja acaba de salir de prisión tras abonar una fianza de 3.000 euros, fijada por la magistrada del juzgado de Instrucción número 2 del municipio torrevejense. Wayne P. W., defendido por el abogado Francisco Miguel Galiana Botella, era el único de los presuntos implicados que estaba en prisión, ya que se le considera el presunto autor material del crimen de su compatriota Carl Carr.
Tras un año y medio entre rejas, desde hace unos días Wayne disfruta de su libertad, pero condicionada por la obligatoriedad de comparecer diariamente en el juzgado con el fin de reducir el riesgo de fuga. El avance en la instrucción del caso depende ahora de las autoridades irlandesas.
La juez de Torrevieja cursó en el primer trimestre de 2019 una orden europea de detención y entrega de otro ciudadano irlandés que presuntamente presenció el crimen y que, a juicio de la Guardia Civil, tuvo una participación activa en los hechos ocurridos en septiembre de 2018. Este sospechoso, un joven de 26 años que se marchó del país tras el crimen, llegó a ser localizado en Irlanda, pero se rechazó su extradición a España.
Tras la negativa a la extradición, la magistrada de Torrevieja ha cursado recientemente una orden europea de investigación para que el sospechoso sea interrogado en su país en calidad de investigado por su supuesta participación en el asesinato. Además de Wayne, la Guardia Civil arrestó a principios de 2019 a la compañera sentimental del presunto asesino, a su ex novia y a un español que presuntamente le ayudó a enterrar el cadáver junto a la autovía entre Benijófar y Algorfa, en Rojales.
