Caso cerrado tras la condena en firme del último de los acusados por el crimen de Javier Redondo, acuchillado y golpeado hasta la muerte delante de su hija de cuatro años frente al Hospital La Fe de València en febrero de 2016. La Audiencia Provincial de València ha desestimado el recurso de apelación del menor que participó en el crimen junto a su padre y otras ocho personas más -todos ellos ya condenados- ratificando así la pena de cinco años de internamiento en régimen cerrado y tres de libertad vigilada por un delito de homicidio con abuso de superioridad, dictada por el Juzgado de Menores número cuatro de València.

El condenado, miembro del 'clan de Benimàmet' y que era menor de edad cuando se produjo el crimen, no negaba su presencia en la furgoneta en la que iban algunos de los condenados por el homicidio, pero siempre ha mantenido que no llegó a bajar del vehículo en ningún momento. No obstante, la sentencia remarca que «la intervención de E. G. S. en los hechos no es baladí, al haber actuado en conjunto del grupo (con los otros nueve condenados por un jurado popular) como uno más, asumiendo con todas sus consecuencias las actuaciones del mismo». Además, su implicación quedó acreditada testificalmente al haber sido visto «corriendo hacia el fallecido con la intención de agredirle».

El móvil del crimen fue el 'vuelco' -robo entre traficantes- de dos kilos de marihuana que la víctima había sustraído al llamado 'clan de Benimàmet' en septiembre de 2015. Esa misma noche, el menor ahora condenado acudió acompañado de otros familiares mayores de edad a la vivienda donde residía Javier Redondo con su madre, a la que le advirtieron de que «si su hijo no devolvía lo que se había llevado, regresarían a la casa y lo matarían».

Según los hechos declarados probados, y ratificados ahora por la Sección Quinta de la Audiencia Provincial de València, el 16 de febrero de 2016, durante el entierro de un familiar, los miembros de dicho clan y dos hermanos con los que también tenía rencillas la víctima, «decidieron saldar cuentas y tender una emboscada a Javier Redondo» citándole a las 13 horas en el aparcamiento de un centro comercial de Quart de Poblet. Hasta allí se trasladó el menor condenado en una furgoneta Renault Traffic conducida por su padre junto a otros parientes. Como su víctima no acudió, «resolvieron tenderle una segunda emboscada en las inmediaciones del Hospital La Fe».

A las 14:22 horas, cuando Javier estacionó su coche en la explanada del Bulevar Sur, y con su hija de cuatro años en el interior del mismo, un mínimo de siete personas, entre las que se encontraba el menor, «de forma sorpresiva» se dirigieron contra éste portando instrumentos peligrosos como palos, un arma blanca y una porra extensible. La víctima trató de huir, siendo alcanzado por el grupo -en el que estaba el menor condenado- quienes actuando en conjunto le agredieron causándole dos heridas penetrantes por arma blanca y numerosos golpes, en la cabeza y la espalda, con un objeto contuso, que le provocaron la muerte.

Siete de los adultos juzgados fueron condenados a penas de doce años y medio de cárcel y los dos hermanos que confesaron los hechos a sendas penas de dos años de prisión como cómplices.