La Guardia Civil de Picassent ha detenido esta madrugada al presunto autor de una violación a una mujer a la que tuvo retenida durante horas en una caseta semiabandonada, en las afueras del municipio, hasta que la víctima pudo escapar en un descuido de su captor. La mujer fue rescatada por una pareja que pasó en ese momento casualmente por la zona, y que tuvo que forcejear con el secuestrador, ya que intentaba arrastrarla de nuevo con él hacia la casa. La víctima se encuentra bien, aunque con magulladuras, heridas y lesiones sufridas durante las agresiones sexuales. El presunto violador permanece retenido mientras avanza la investigación.

Los detención se produjo ya de madrugada, pero los hechos habían sucedido mucho antes. Fue pasadas las nueve de la noche cuando una pareja joven que regresaba a su casa en coche vio, en el Camí del Realón, en Picassent, a un hombre desnudo que trataba de arrastrar por la fuerza a una mujer hacia el interior de la maleza. Sin dudarlo, detuvieron el vehículo y el chico salió en auxilio de la mujer. No fue fácil. Tuvo que forcejear con el secuestrador hasta que logró arrancarle a su víctima e introducirla en su propio vehículo. La pareja llevó a la mujer directamente al cuartel de la Guardia Civil, que a partir de ese momento le prestó asistencia a la víctima y puso en marcha un operativo para detener al autor de la brutal agresión.

Una pareja que pasaba por la zona vio a un hombre desnudo que arrastraba a una mujer hacia la maleza

Gracias al testimonio de la mujer, que tuvo que recibir asistencia médica en el hospital y reside en otro municipio distinto que Levante-EMV no revela para garantizar su anonimato, supieron que su presunto agresor había sido pareja suya hasta hace unos meses, en que terminó la relación. Ayer, martes, la mujer accedió a ir con él a su casa, pero su intención no era en absoluto volver con él, de manera que cuando él le propuso mantener relaciones sexuales ella se negó.

Fue entonces cuando, por la fuerza y bajo amenazas, comenzó a violarla. Y así permaneció durante horas hasta que, en un momento determinado, le pidió que la dejara salir un momento porque necesitaba orinar y en la casa, completamente desastrada y llena de enseres y deshechos, ni siquiera había baño.

La mujer aprovechó ese momento para salir corriendo a la carretera, pero su captor se dio cuenta de sus intenciones y salió inmediatamente a por ella sin importarle siquiera que estaba totalmente desnudo, amparado en el convencimiento de que nadie les iba a ver. Se equivocó: la fortuna hizo que justo en ese instante pasara el coche de la pareja y que intervinieran inmediatamente al ver la escena.

La Guardia Civil cercó la vivienda

Una vez asegurada la atención de la víctima en el cuartel de Picassent, agentes de ese cuerpo salieron de inmediato hacia la casa, donde ya les aguardaba otra patrulla de la Guardia Civil. Los agentes cercaron la vivienda durante más de dos horas para evitar la huida del maltratador.

Pasadas las doce de la noche, llegó al lugar el tío del sospechoso, quien no solo les autorizó, como morador de la vivienda, a entrar y registrar la casa, sino que además les contó que su sobrino le había pedido que “se perdiera unas horas” para quedarse a solas en la vivienda con su expareja, aunque el hombre no tenía ni idea de cuáles eran en realidad las intenciones de su sobrino.

Así las cosas, los agentes de la Guardia Civil de Picassent, pertrechados con escudos y chalecos dado que estaban advertidos de que posiblemente disponía de un arma de fuego y de varios machetes, revisaron y aseguraron una por una las estancias, hasta que, en la segunda planta, encontraron, oculto bajo una manta, entre escombros y basura, al presunto violador, totalmente desnudo. Era la una de la madrugada.

La Guardia Civil encontró oculto bajo una manta, entre escombros y basura, al presunto violador, totalmente desnudo

El sospechoso, que ofreció una fuerte resistencia, fue finalmente reducido, para lo cual el guardia civil que lo localizó tuvo que hacer uso de su escudo para inmovilizarlo. El agente, auxiliado por sus compañeros y por policías locales de Picassent que también se habían sumado al operativo, colocó las esposas al presunto violador, que fue trasladado al cuartel de ese municipio de l’Horta Sud.

 El presunto violador de Picassent había sido infante de Marina

El hombre detenido por presuntamente violar a su expareja durante horas en una casa abandonada

de las afueras de Picassent había sido infante de Marina, según le había contado a su víctima cuando ambos mantenían una relación, hace meses. La mujer advirtió a la Guardia Civil de que posiblemente tenía un arma de fuego, lo que obligó a los agentes de ese cuerpo y de la Policía Local a extremar las precauciones ante la posibilidad de que hiciera uso de algún arma. Finalmente, los agentes no encontraron ninguna pistola.

El detenido tiene un amplio historial delictivo con multitud de detenciones por distintos delitos, entre ellos, el de malos tratos, aunque al parecer no había sido denunciado con anterioridad por la mujer a la que esta madrugada raptó y agredió sexualmente durante más de dos horas.

La víctima, residente en otro municipio valenciano que Levante-EMV no revela para preservar su identidad, ha recibido asistencia en un hospital y ya ha formalizado la denuncia por lo sucedido.