Una discusión previa entre las parejas de la víctima y del presunto agresor por una cuestión banal como es el ruido acabó en una mortal paliza en marzo de 2019 en el barrio paternero de La Coma, en la que perdió la vida Joaquín Mir Vilches, y por la que ahora su presunto asesino se enfrenta a una petición de pena de 25 años de prisión. El fiscal aprecia que los hechos son constitutivos de un delito de asesinato al contemplar las circunstancias de alevosía —la víctima no tuvo oportunidad alguna de defenderse— y de ensañamiento —al causarle «un daño absolutamente gratuito aumentando de forma intencionada su dolor»—.

Un jurado popular será el encargado de dirimir a partir del próximo lunes sobre la responsabilidad penal del acusado, Francisco José B. D., de 34 años. Su defensa tratará de acreditar que la muerte no se produjo como consecuencia directa de la brutal paliza que recibió la víctima, sino por la patología coronaria previa que éste padecía.

La noche del 11 de marzo de 2019 el procesado estaba esperando a su vecino en el portal del domicilio, en el barrio de La Coma de Paterna, ya que horas antes la mujer de la víctima le había recriminado a la esposa de éste por hablar demasiado alto de buena mañana. «La situación era tensa entre ambas familias», remarca el fiscal en su escrito. Así, cuando Joaquín regresaba de comprar junto con su mujer y su hijo de 16 años, el acusado le gritó de forma amenazante y, «sin darle tiempo a reaccionar ni oportunidad de defenderse», comenzó a propinarle golpes y puñetazos en el estómago y el rostro.

Debido a la «brutalidad de la paliza», según incide la Fiscalía, la víctima cayó al suelo de rodillas semiinconsciente y con la cara ensangrentada, «situación que aprovechó el acusado para continuar pegándole», con patadas en el pecho y la cara. El fiscal aprecia que hubo ensañamiento ya que el agresor le causó un «daño absolutamente gratuito, aumentando de forma intencionada su dolor y sin importarle las consecuencias de su acción». Joaquín Mir falleció en la ambulancia cuando era trasladado al hospital debido a «los numerosos y violentos golpes recibidos que le causaron un traumatismo torácico de fatales consecuencias».