Un hurto de guante blanco. Un delincuente que acumula 25 detenciones por delitos contra el patrimonio ha sido detenido por la Policía Nacional tras apoderarse el pasado 17 de diciembre de seis relojes de lujo valorados en 55.000 euros tras hurtarlos al descuido de una caja fuerte en un conocido centro comercial de la calle Pintor Sorolla de València.

Después de horas de vigilancia, el ladrón aprovechó un despiste del empleado, que se dejó abierta la puerta mientras atendía a un cliente, para entrar en el cuartito del personal y coger rápidamente los relojes, de la marca Omega, sin ser visto, antes de que el trabajador regresara y cerrara la caja. Posteriormente salió con su preciado botín en una bolsa comercial de este establecimiento como un cliente más por la puerta principal. Al ser un producto que no está expuesto al público no llevaba ningún sistema de alarma y pudo salir sin problemas por el arco de control.

No fue hasta un día después cuando el comercio detectó que le faltaban seis relojes de gran valor de la caja fuerte. Así, después de revisar las grabaciones de las cámaras de seguridad, pudieron comprobar como esta persona había hurtado al descuido los valiosos relojes sin que nadie se percatara de su presencia.

Fruto de las investigaciones de la Policía Nacional se ha podido identificar y detener al presunto ladrón, quien cuenta con numerosos antecedentes por delitos similares. El arrestado, de 37 años y nacionalidad peruana, fue puesto a disposición del Juzgado de Instrucción número uno de València acusado de un delito de hurto agravado por la cuantía de lo sustraído.

Tras tomarle declaración y dado que ya ha sido detenido hasta en 25 ocasiones por otros delitos contra el patrimonio, el juez acordó su ingreso en prisión provisional a la espera de juicio.

La defensa del detenido trató de acreditar que tiene domicilio conocido y que no hay riesgo de fuga, además de que el delito por el que está acusado no está especialmente penado, al no haber hecho uso de la violencia ni siquiera de la fuerza —la caja fuerte no fue forzada porque estaba abierta—. No obstante, dada la reincidencia del delincuente, especializado en este tipo de hurtos, y la cuantía de lo robado, que supera los 50.000 euros, el fiscal solicitó su ingreso en prisión provisional.

Además, tras el registro realizado por la policía en el domicilio del presunto ladrón, que fue identificado por las cámaras de seguridad, no se ha podido recuperar ninguno de los seis relojes sustraídos, alguno de ellos valorado en más de 10.000 euros.